Cambia comportamiento

AutorArely Sánchez

Seis años después de su lanzamiento, El Buen Fin ya es una tradición entre las familias mexicanas, al grado de que muchas de ellas han generado un ahorro especial para ser gastado justo en los cuatro días de descuentos y aprovechar las mejores ofertas al contado.

Líderes empresariales y funcionarios coinciden en que a pesar de que la confianza del consumidor tocó en octubre su nivel más bajo en la historia de su medición, se espera que El Buen Fin logre no sólo mantener sino incrementar sus ventas.

De hecho la meta mínima a alcanzar son 4 mil millones de pesos extras en ventas, equivalentes a 5 por ciento adicional en comparación con los 80 mil millones de pesos que se obtuvieron durante el Buen Fin de 2015, según cifras del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), responsable de medir las ventas del programa.

Enrique Solana, presidente de la Confederación de Cámaras de Comercio, Servicios y Turismo, sostuvo que el buen ánimo con respecto a lo que sucederá en los cuatro días de promociones y rebajas se debe a que el Buen Fin es un evento ya está en la planeación familiar, por lo que preparan con anticipación a través del ahorro para hacer sus compras, que cada vez son más planeadas.

De hecho, la subsecretaria de Competitividad y Normatividad, de la Secretaría de Economía, Rocío Ruiz Chávez, aseguró que son cada vez más las personas que pagan de contado durante El Buen Fin.

"En la edición del 2015, 62 por ciento de los consumidores pagó sus compras con efectivo o con tarjeta de débito, lo que demuestra...

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