Calidez amurallada

AutorAlicia Boy

REFORMA/Enviada

CAMPECHE.- De una paleta tomaron los colores cálidos del pasado para dibujar el presente y plasmar el corazón campechano en sus muros.

Borraron del paisaje cables y postes, y en las paredes pintaron los faroles que alumbrarían su escena hasta el nuevo amanecer. El día trajo consigo un nuevo Campeche. Un Campeche recién extraído del lienzo.

La ciudad amurallada fue restaurada, las fachadas de sus edificios recuperaron la fuerza que perdieron por el yugo del tiempo y la invasión de un moho ennegrecido. Cinco años de restauración de fachadas dejó como resultado una alegre ciudad de colores que van del azul, amarillo y verde olivo, hasta el mamey, rosa y naranja.

Colores que han sido delineados por franjas blancas, frisos, puertas y ventanas destacando la belleza de su arquitectura colonial de altos techos y hermosos patios centrales.

Para comprender su belleza es necesario caminar por sus calles adoquinadas, descubrir sus rincones más hermosos y saludar a los transeúntes que por más prisa que tengan no dudan en ayudar a algún turista despistado.

El Nacimiento de Campeche

Antes de la colonización ya existían poblaciones mayas que habitaban en la costa y que se dedicaban a la pesca; una de éstas fue la "afortunada" en ver llegar los galeones de Francisco Hernández de Córdoba, el 22 de marzo de 1517.

Este poblado pertenecía a la provincia de Ah Kin Pech, nombre que significa sacerdote del sol llamado garrapata, y que dio origen al nombre que posteriormente le dieron los españoles: San Francisco de Campechuelo.

En 1540 Francisco de Montejo fundó la Villa y Puerto de San Francisco de Campeche. Una vez establecido, repatrío las tierras con trazos que se asimilan una cuadrícula perfecta y designó unos cercanos al mar a la Plaza de Armas que estaría rodeada de los edificios de poderes: la Catedral, el Cabildo, la Aduana, la Atarazana (bodegas para municiones) y la casa de los colonizadores.

Por muchos años Campeche se convirtió en el segundo puerto más importante después de Veracruz. A él arribaban y zarpaban la mayoría de los barcos de la corona que eran portadores de riquezas lo que motivó la aparición de la piratería en el Golfo de México y el mar Caribe.

Con el inicio de los atracos piratas en el Siglo 17, se decidió la construcción de una fortificación que la protegiera; al diseño perfecto de la ciudad se le aunó el de la muralla cuyas Puertas de Tierra y Mar forman una línea dándole una perspectiva única a su trazo.

Al recorrer...

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