Buscan combatir exclusión por VIH

AutorOmar García

En México, quienes padecen el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), causante del Sida, aún enfrentan despidos injustificados, aislamiento escolar y la incapacidad del Estado para atender el problema.

Para apoyarlos en ese ambiente permeado por la discriminación, marginación e ignorancia surgió la Fundación Eudes, que se instituyó como organismo civil en 1999, aunque venía trabajando desde tiempo atrás.

El objetivo de la organización es devolverle la "dignidad humana" a quienes tienen el padecimiento mortal e incurable, que daña el sistema inmunológico dejando a la persona expuesta a enfermedades.

Para lograr lo anterior Eudes realiza pláticas, tratamientos nutricionales y psicológicos, capacitación laboral y actividades preventivas y recreativas, pues algunas personas con VIH no se atreven siquiera a ir a una fiesta.

Los beneficios los reciben en la actualidad unas 150 personas, en la sede de la fundación en la Ciudad de México y en sucursales de Morelia, Monterrey, Guadalajara y Ciudad Altamirano, en Guerrero.

Se trata de un grupo integrado por mujeres y hombres de diversas edades, en general de bajos recursos, incluso hay familias cuyos miembros, en su totalidad, están contagiados de VIH, u otras en las que sólo algunos.

Quienes reciben ayuda nutricional pagan una cuota de recuperación simbólica, acorde con sus posibilidades económicas; el fin es evitar que la ayuda se vea como una especie de limosna.

"La persona con VIH-Sida lo primero que pierde es la seguridad en sí mismo y por consiguiente la seguridad de enfrentar el mundo. Es rechazada, juzgada, culpabilizada", dice Manyi Izquierdo, presidenta de Eudes.

Integración a la Sociedad

En la institución no tienen a personas internas, pues su meta fundamental es lograr reintegrar a los enfermos de VIH a la sociedad, sin que pierdan la conciencia de que seguirán viviendo con el virus.

Esto es posible con la combinación de las áreas de trabajo de la fundación: en pláticas los pequeños pueden aprender que en caso de cortarse ellos mismos deben curarse o que no se pueden vacunar porque pueden enfermarse.

Mientras que la capacitación laboral, que se basa en clases de computación y de reparación de equipos, tiene como meta que las personas puedan salir a buscar trabajo y así sentirse productivas.

Pero falta que la sociedad aprenda que es posible que una persona con VIH pueda trabajar, y eso es fundamental, porque alguien que no cuenta con la capacidad de mantenerse no puede tampoco elevar su...

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