Busca AL nueva vía
| Autor | Alejandro Pairone |
REFORMA/ ARGENTINA
Para América latina el 2004 se presentó como el año en que muchos de sus países comenzaron a consolidar un proceso de cambio hacia nuevas formas políticas.
Aunque estos cambios tienen un destino todavía incierto, los Gobiernos que los han emprendido tienen como denominador común el rechazo al pasado más que la certeza sobre el futuro.
La región atraviesa un proceso de transformación iniciado con el fracaso de las políticas neoliberales aplicadas acríticamente durante los últimos 30 años que se tradujeron en un incremento de la pobreza, la exclusión y la desestructuración social, y convirtieron a América latina en la zona más desigual e injusta del planeta.
Pero la ruptura de los paradigmas de las últimas décadas no significa la desaparición automática de los poderes que los sostuvieron.
Como consecuencia, parte de Latinoamérica fue quedando durante este siglo 21 en manos de un mosaico de Gobiernos procedentes de partidos de izquierda o de barrios vecinos, que aplican políticas heterodoxas que no rompen con los patrones económicos de la década anterior pero que buscan formas de revertir la inequidad regional.
El proceso de cambios inciertos tiene su epicentro en Sudamérica, en particular en los países ubicados sobre la cuenca atlántica, como Brasil, la Argentina, Uruguay (a partir de marzo, y además Venezuela. Todos dicen ir más o menos para el mismo lado, pero transitan caminos diferentes sin romper los consensos con el mercado.
Con un pie dentro y un pie fuera de ese bloque camina Chile, mientras Bolivia aparece como el más seguro en convertirse en el quinto integrante pleno del club sudamericano, al que Panamá presentó solicitud de ingreso y Nicaragua mira con cariño mientras se peina para el foto del carnet.
Cercano al pensamiento de centroizquierda (más de centro que de izquierda) el ex vicepresidente argentino, Carlos "Chacho" Álvarez, dice que el nuevo proyecto latinoamericano se sustenta en "calidad institucional, crecimiento económico y equidad distributiva".
La consolidación de estos procesos políticos nacionales y regionales se produjo en todos los casos por la vía electoral. Los Presidentes de Venezuela, Hugo Chávez; de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y de Chile, Ricardo Lagos, lograron que sus candidatos se impusieran ampliamente en comicios regionales.
En Uruguay y Panamá, Tabaré Vázquez y Martín Torrijos, respectivamente, están encolumnados de manera clara y taxativa con la nueva sintonía continental...
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