Brindan a divorciados un espacio para sanar
| Autor | Andrea Menchaca |
Reconstruir las emociones después de un divorcio puede ser un proceso muy difícil, pero la carga puede ser más ligera si se recupera acompañado por un grupo de amigos que hayan pasado por su problema.
Ésta es la base con la que funciona el grupo Ágape, un grupo de divorciados que se reúne desde hace cuatro años, semanalmente, en la Parroquia de Fátima, en la Colonia del Valle, y en el que sus miembros reciben charlas y dinámicas que les ayudan a superar el dolor de una separación y desarrollarse como personas.
Quienes integran el grupo, único dentro de la Arquidiócesis de Monterrey, coinciden en que se abrió un espacio en la Ciudad que antes no tenían y que realmente se necesitaba. Tan es así, que la cantidad de enlistados supera los 600.
Hasta 90 por sesión
En el 2003, el sacerdote Alfonso Miranda, quien ese tiempo era párroco del Santuario Nuestra Señora de Fátima, ofrecía el curso llamado "Reconstruyéndose cuando una relación termina".
Sin embargo, después de que las personas que habían pasado por un divorcio terminaban el curso de 14 sesiones, el sacerdote sentía la inquietud de que no había nada más que ofrecerles.
En Monterrey, las cifras de divorcios se han duplicado en los últimos 10 años, de acuerdo con el Registro Civil, al pasar de 2 mil 161 divorcios, en 1997, a 5 mil 134, en el 2007.
"Fue entonces cuando propusimos la idea de hacer un grupo para personas que habían atravesado el divorcio, para que tuvieran un seguimiento, formación humana y espiritual, acompañamiento, y un espacio de diálogo y de fraternidad", relata el rector del Templo San Maximiliano María Kolbe.
Fue entonces que el grupo Ágape comenzó en el Santuario Nuestra Señora de Fátima, en la Colonia del Valle, donde Miranda fungía como vicario en este momento.
"Empezó con cuatro personas, muy lento, muy lento; después de un semestre o un año lo más que completamos fueron 40", recuerda el director del grupo Ágape.
"Nos cambiamos aquí a San Maximiliano y se redujo a 12, entonces regresó a Fátima y se recuperó a 30, y ahora dio un boom de hasta 90 personas por sesión".
Y es que el grupo coordinador, explica, desde hace un año y medio se dedicó con más intensidad a buscar conferencistas, apostolados, reuniones y convivencias.
Los coordinadores indican que en su base de datos tienen registradas a 600 personas.
"De boca en boca es como ha surgido", indica Gabriela Girón, responsable del equipo coordinador.
"Es una población flotante y circulante, diría yo, porque los que...
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