Bravo no se ilusiona

AutorPatricia Riba

El dolor no disminuyó y la preocupación aumentó, por eso Omar Bravo decidió no arriesgarse más y prácticamente descartó que pueda participar hoy ante Pumas para no agravar más el esguince de primer grado que sufre en el tobillo izquierdo.

Sin embargo, la esperanza es lo último que muere y tanto Bravo como el técnico Benjamín Galindo esperarán hasta el calentamiento previo al partido para decidir si el delantero está en condiciones de jugar o si será preferible darle descanso.

"No entrené al parejo del grupo, realmente las posibilidades son muy pocas de que pueda jugar, es la realidad, tengo la ventaja de que Benjamín me está dando hasta el día de mañana (hoy) para ver como me siento", declaró el atacante rojiblanco.

Durante el entrenamiento de ayer, Bravo no pudo ocultar la angustia que le provocó no sentir mejoría en su lesión, trató de participar en algunos ejercicios junto con sus compañeros, pero comentó que no siente la seguridad para tener el desgaste de un partido de Primera División.

"Más que nada no puedo, no tengo la fuerza necesaria en el tobillo, se me dobla muy fácilmente, espero poder llegar mañana un poco mejor", confesó el sinaloense.

"Tengo miedo que pueda suceder algo peor y eso me merma, trato de proteger el pie y eso no me ayuda porque puedo hacer que algo se haga muy crónico y después no tenga remedio".

Debido a la constante participación que ha tenido con el Rebaño y la Selección Nacional, Omar no le ha dado el descanso suficiente a su tobillo para que sane, situación de la cual hoy se arrepiente.

La infiltración ya no es una opción para él, a mitad de semana Bravo intentó eso contra Cobreloa y no surtió efecto, ya que a los 23 minutos tuvo que...

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