Antes de la boda, bautizan a Rocco
DORNOCH, Escocia, (REUTERS/AP/DPA/AFP).- Con los ojos del mundo sobre ella, y a 24 horas de su boda, Madonna y Guy Ritchie, desafiaron ayer la lluvia y la agitación periodística para bautizar a su hijo, Rocco, en la catedral de Dornoch.
El bebé, de cuatro meses, fue llevado hasta la iglesia del Siglo 13 por el cineasta, quien ataviado con un abrigo largo y oscuro lo cargaba envuelto en una frazada blanca para protegerlo del frío.
En tanto, Madonna, con el cabello recogido, se protegía con un abrigo crema hasta los tobillos, sonreía y saludaba a las cerca de 500 personas, entre periodistas y residentes del pueblo, que se apretujaban en la calle frente a la entrada principal del templo y que esperaron a la pareja por muchas horas.
"Rocco es nuestro rayo de luz de Dornoch", rezaba un cartel que exhibía un residente del lugar aludiendo al disco de la cantante premiado con un Grammy, "robándoles cámara" a sus padres.
Los habitantes de Dornoch habían llegado desde de las 16:00 horas locales, junto a centenares de fotógrafos y gente de prensa. Casi muertos de frío, su espera fue recompensada al llegar los primeros invitados a partir de las 18:00 horas.
En medio de una llovizna, todoterrenos transportaron a los tan sólo 45 invitados que pudieron pasar los estrictos controles de ingreso, entre ellos, los padres de la pareja, la actriz Gwyneth Paltrow, quien será la Dama de Honor de la cantante; Stella McCartney, quien diseñó el vestido de la novia; el actor Rupert Everett, y los que serían los padrinos de Rocco, Sting y su esposa, Trudie Styler, quien presentó a los novios el año pasado.
Sting, que había realizado pruebas de acústica en la iglesia y por lo que se esperaba que cantara durante la ceremonia, fue quien tuvo una recepción más entusiasta.
Cuando los novios salieron de la iglesia, media hora más tarde, hicieron una breve pausa y luego ascendieron al automóvil para desaparecer entre la niebla.
La catedral permaneció cerrada al público durante los 30 minutos que duró el bautismo, celebrado por la reverenda Susan Brown, quien también consagrará la boda.
En esta iglesia, ubicada cerca del castillo gótico Skibo, a 900 kilómetros de Londres y a menos de 10 de Dornoch, se celebrará hoy la boda entre la cantante y el director de cine.
Para Madonna, una católica divorciada, y Ritchie, un protestante, la Iglesia de Escocia presentaba un servicio sencillo. Tradicionalmente, el bebé es bendecido con la señal de la cruz con agua bendita sobre la frente...
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