EN BOCA CERRADA / No es lo duro, sino lo tupido

AutorClaudia de Icaza

Algo me hace pensar que esta vez no habrá santo, rezo ni Señor que le salve el pellejo a Kalimba.

Y no me refiero a lo duro y difícil que se ha tornado el caso que lo involucra como supuesto violador de Daiana, que todavía no se resuelve, sino por lo tupido que se le viene con las fuertes acusaciones que su ex prometida hizo a una revista, en las que aseguró que no sólo ella fue abusada sexualmente por el cantante, sino también su pequeña hija de 5 años, situación que Kimberly piensa denunciar y llevar hasta las últimas consecuencias.

Otra más dispuesta a acabar con la aparente inocencia que él mostró cuando salió de aquel penal, segurísimo de que ahí terminaba su peregrinar por los juzgados.

Y, aunque no es mi intención poner la mano en el fuego por nadie ni señalar quién es la víctima o el victimario, hay algo que me hace dudar del extraño proceder de esta mujer y de la veracidad de sus palabras.

¿Por qué no acudió en primera instancia al lugar indicado para denunciar tal brutalidad?

Confesar a calzón quitado frente a un reportero las bajezas de las que fue objeto dejando para "después" la queja que debió poner ante la autoridad competente e idónea para buscar apoyo y justicia resta credibilidad a su dicho.

No hay forma de justificar que haya vendido la "exclusiva" de este supuesto delito, como tampoco habrá manera de creer en Kalimba si éste no la demanda civil y penalmente por difamación y daño moral.

El que calla otorga.

Pretender aferrarse al recurso de la oración para ganar una instancia en un juzgado no aplica.

Quien no atiende en tiempo y forma un asunto legal irá directito a vivir el infierno en un...

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