Una niña bien... mala / Calor y humedad, mezcla playera

AutorMilah

¿A poco no es delicioso desentenderse de todo de vez en cuando y únicamente dedicarte a ti?

Después del sube y baja emocional por el que pasé las últimas semanas, decidí olvidarme de mis preocupaciones y sacarme el estrés que había acumulado, así que me lancé a festejar el cumple de uno de mis mejores amigos, en Playa del Carmen.

Hacía años que no veía a muchos de mis amigos y la emoción me tenía excitada.

Mi amigo, el cumpleañero, pasó por mí al aeropuerto y a partir de ahí todo fue locura, emoción, aventuras y pasión. Él insistió todo el camino en que moría por presentarme a una pareja de amigos que no se perdían mis anécdotas y que querían experimentar un par de travesuras, así que ya podrán imaginarse cómo mi libido subió hasta el cielo y mi corazón comenzó a latir en busca de diversión y adrenalina.

-¡¡¡Hola Milah!!! Moría por conocerte, bienvenida.

Mejor recibimiento no pude haber tenido. Desde el momento en que bajé de la camioneta, una chica morena, alta de ojos hermosos y boca deliciosa salió corriendo a saludar y fue la encargada de darme el tour por toda la casa donde amablemente me hospedaron y que sería la sede de la tan esperada fiesta.

-Amor ven, ya llegó Milah sal a saludarla.

¡Definitivamente una de las mejores parejas con las que he tenido la fortuna de cruzar mi destino! Él también muy bien parecido, alto, bronceado, de muy buen cuerpo, se acercó amablemente y me saludó con un beso caluroso en la mejilla.

La tarde pasó entre risas y juegos, y poco a poco fueron llegando todos los invitados.

La gente se fue mezclando, la música electrónica inundaba cada habitación de aquella morada y el ánimo de todos estaba lleno de la mejor vibra del universo. Había ambiente para lo que se les antojara, área de fumar, área de bailar, área de chill out y mi sección favorita: la alberca.

Por supuesto en cuanto me cansé de bailar como loca, salí disparada a refrescarme a la alberca deliciosa que estaba ya llena de gente alternativa y súper alivianada, así que sin más me acerqué a los anfitriones y les agradecí de todo corazón haberme incluido en sus planes aquel fin de semana de locura e intensidad.

-Milah, queremos pedirte un favor. Llevamos meses intentando hacer algo diferente, algo más que simples juguetes sexuales, algo que nos deje a ambos con ganas de más y te queríamos invitar a participar con nosotros en algo súper kinky, ¿cómo ves?

¡Ustedes ya saben mi respuesta! Obviamente grité que sí desde antes de que terminaran de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR