Bernardo González Mora / Reacción ciudadana

AutorBernardo González Mora

La incertidumbre frente al futuro, las inconformidades y preocupaciones del presente de la mayoría de los ciudadanos nos motivan a reaccionar defensivamente y a organizarnos.

No hay partido político con la historia, sus relaciones domésticas, en la forma como se manifiestan sus confrontaciones internas y como las procesan, ni su posicionamiento frente a los problemas de la sociedad, que se salve de cuestionamientos y que encarne la confianza absoluta para la sociedad, ni todos sus miembros están exentos de críticas como para entregarles a ojos cerrados nuestro destino.

Michelangelo Bovero comentaba que siempre llegan los malos porque mientras los buenos se la pasan pensando todo lo que harían en beneficio de la gente, los malos solo piensan en ganar el poder y se dedican a lograrlo. Siendo director de la Escuela Nacional de Cuadros del Comité Ejecutivo Nacional en la Presidencia de mi entrañable amigo Genaro Borrego, en una reunión con mis colaboradores uno de ellos me cuestionaba mi franco apego a mis convicciones políticas lo que, según él, me provocaría fricciones, que debería moderar mi discurso porque lo importante era aprovechar la magnífica posición que tenía para lograr mejores oportunidades; mi respuesta fue que para mí lo más importante era ser congruente con mi sentido moral porque sin él, la ideología solo representaría una farsa, la perversión, la corrupción y el desastre social. Sin darse por vencido agregó: "estimado amigo, estás en una selva entre fieras despiadadas; si quieres llegar, atiende la moral mientras no te estorbe".

Ese ambiente de barbarie, de competencia constante donde la moral "estorba" es el marco pedagógico en el que se forma o se deforma la clase dirigente. Nuestro modelo electoral es precisamente el que propicia ese ambiente selvático de la política en nuestro país y se da tanto al interior de los partidos -al disputarse entre sus miembros las dirigencias y el control de sus órganos de gobierno como preámbulo para lograr las candidaturas- para, enseguida, pasar a la disputa electoral entre partidos en la que...

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