BENCHMARK / Vivir de un cliché
| Autor | Jorge A. Meléndez Ruiz |
"'Gastamos un millón de millones de dólares en entrenar a los mejores soldados del mundo para convertirlos en el peor ejército del planeta'. A Trump le encantó eso también (dicho por Steve Bannon). Estaban buscando crear políticas con puras frases cliché".
Así describe Bob Woodward el pensamiento simple de Donaldo en otro interesantísimo pasaje del su libro "Fear". Le platico.
La anécdota se refiere al involucramiento de Estados Unidos (EU) en Afganistán. Resulta que Trump históricamente ha atacado agresivamente la presencia de su país en esta guerra contra el Talibán y el terrorismo islámico (recuerde que ese país fue cuna de Al Qaeda).
Tras los ataques de septiembre 11 del 2001, EU se metió en un combate imposible de ganar. Y Donaldo quería salirse a toda costa. Los generales y especialistas le insistían que esto no solucionaría nada: "Si nos salimos, Afganistán se convertirá en un Iraq con esteroides", le advirtió Lindsey Graham, un senador republicano. Es decir, más terroristas... y mayor riesgo de ataques.
Pero Donaldo no entendía y tras hartarse de los expertos, mejor se reunió con 4 soldados para platicar. Ya después en otra junta se chancleó a todos sus generales por más de media hora: "Los soldados dirigirían la guerra mejor que ustedes", les gritó (entre muchos otros insultos).
Impactante. Está clarísimo que Mr. Orange prefiere frases mediáticas y tweets al análisis detallado y preciso requerido para crear estrategias y tácticas para afrontar gradualmente problemas complejos.
¿Pero sabe qué? Este es un riesgo que no se limita al terrible bebé narciso que ocupa hoy la oficina oval. Vivir con base en clichés es una aflicción de la que cualquiera se puede contagiar.
Y es que en la era de la hípercomunicación estamos tan inundados de información (y fake news) que una consecuencia es la superficialidad. Entonces muchos terminan por preferir lo que suene bien y sea simple a todo aquello que requiera introspección y análisis.
Lo malo es que el/la que vive con base en estos clichés se arriesga a:
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Privilegiar creencias sobre análisis factual.
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Equivocarse (y fracasar) más frecuentemente.
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Ser rebasado por competidores.
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Perder clientes.
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Ser intransigente y rígido.
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Estancarse en un mundo dinámico.
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Aislarse porque los demás lo evitan.
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Rodearse de lambiscones y no de talentosos.
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Provocar grillas y pleitos a su alrededor.
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Perder amigos y/o relaciones familiares.
Así como le pasa a Trump. ¿Qué hacer? Lo bueno es que...
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