BENCHMARK / Liderazgo a lo Simio
| Autor | Jorge A. Meléndez Ruiz |
Recién se estrenó en México la película "El Planeta de los Simios: Confrontación". La vi en preestreno la semana pasada y está palomera. Se la recomiendo.
Pero lo que más me llamó la atención es que, con ojos de "Benchmark", la película puede ser un libro sobre liderazgo.
Los conflictos entre simios y humanos, junto con las traiciones y peleas por la "Dirección", son marco perfecto para derivar lecciones aplicables a los negocios.
De una historia en la que César el simio es el líder más efectivo y donde se desprenden 12 enseñanzas peliagudas:
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Hay que elegir bien a colaboradores clave.
Hay que balancear al equipo entre estrategas y operadores. Entre diseñar y ejecutar. Buscar complementar al líder, pero filtrando bien. En tiempos de crisis, las diferencias en perspectivas y estilos pueden causar problemas serios. Un traidor en el círculo íntimo es mortal, pues conoce estrategia y puntos débiles.
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La confianza se gana con hechos, no con palabras.
Al negociar una alianza con un competidor, el diálogo es bueno para establecer bases. Pero la confianza es el fundamento vital para que la alianza perdure. Y ésta se gana con hechos.
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A veces, la fuerza bruta no es la mejor arma.
Actos impulsivos pueden causar graves conflictos, sobre todo cuando no se está bien informado. Resolver todo con agresividad es como tener puros martillos en la caja de herramienta. ¿Y si necesita un desarmador?
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Hay que dar tiempo al equipo para encontrar alternativas.
Particularmente, si la estrategia que el líder pretende seguir es riesgosa. Delegue a sus colaboradores, déjelos que exploren mejores soluciones.
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El líder debe mostrar fuerza.
Sobre todo ante una crisis. Cuando el pánico cunde, el líder actúa, dirige. Y cuando hay que pelear, pelea. No se arruga. El equipo siempre verá cómo actúa el líder cuando hay problemas. Su fortaleza puede levantar a un equipo derrotado.
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La fuerza no es suficiente.
Inteligencia y visión son igual de importantes, sobre todo ante lo desconocido. Ver más allá de los problemas actuales. Buscar soluciones que eviten batallas innecesarias. Conocer al adversario para entablar negociaciones creativas.
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Una guerra frontal no siempre tendrá un ganador claro.
Un conflicto entre adversarios poderosos siempre dejará muchas víctimas, pero no siempre un vencedor. Las guerras siembran rencores que pueden durar más allá de la batalla.
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Si lo vencen, reagrúpese. Busque a sus aliados y elija bien cuándo atacar de nuevo.
Morir en el campo de...
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