BENCHMARK / El escalón y el vaso
| Autor | Jorge A. Meléndez Ruiz |
"Cantado, esta temporada seremos campeones", comentario de WhatsApp de un aficionado tras el buen paso de su equipo de fútbol, faltando todavía de jugarse la mitad de la temporada y la liguilla.
"Esto es lo mismo de siempre. Estoy indignada y me siento traicionada", comentario en Facebook de una seguidora de Jaime Rodríguez cuando no actuó rápido en un caso de clara corrupción.
Dos extremos: júbilo anticipado y desilusión total. Algo muy común en México. Marearse al subirse a un escalón o bien ahogarse en un vaso de agua. Las frases iniciales (reales y recientes) reflejan dos ámbitos donde claramente se da este fenómeno: los deportes y la política.
Pero su prevalencia es generalizada. Las redes sociales y la comunicación instantánea y masiva privilegian la diseminación y contagio de la desesperación colectiva y la alegría desmedida.
Aparte, ambas aderezadas de cuatro ingredientes adicionales:
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Creer todo. No discriminar el origen (fuente) de la información. Algo así como: si está en la red, seguro es cierto... y a compartir.
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Impaciencia. Rechazo a la lentitud: "Que lo hagan ya".
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Culto a curas mágicas. "No es tan difícil. Cuestión de decisión y acción. Es todo".
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Enamoramiento de la cultura del "compló". "Seguro que Peña le habló al presidente fulanito y arregló todo". Etc, etc.
Cuatro elementos que hacen que personas inteligentes adopten posturas simplistas que a veces no aguantan un análisis.
Como espectador, algo interesante, curioso y hasta simpático. Pero como hombre o mujer de negocios, un peligro. Estas actitudes pueden contagiarse y afectar la toma de decisiones en una empresa.
¿Cómo evitar caer en estas trampas? Le propongo el modelo para evaluar acciones de vida "Del escalón al vaso de agua". ¡Digno de McKinsey o BCG! Tiene dos ejes y cuatro cuadrantes, todos relacionados al beneficio o daño de lo que se evalúa. Por ejemplo, el buen paso del equipo o el malo del político iniciales.
En el eje horizontal se mide la cercanía del beneficio o daño y en el vertical su impacto. Cuatro cuadrantes, cuatro acciones (vea gráfico):
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Lejos de suceder, Bajo impacto: ¡OLVÍDELO! No se estrese o se emocione. No vale la pena. Busque otra cosa.
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Lejos de suceder, Alto impacto: ¡OCÚPESE! ¿Qué se necesita hacer para lograr o evitar (según el caso) lo que se busca? Si es bueno, buscar mover al cuadrante 4. ¿Malo? Al 1.
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Cerca de suceder, Bajo impacto: Si es bueno, ¡ESCÁLELO! Pasarlo al cuadrante 4. Si es malo, ¡ELIMÍNELO! Pasarlo al 1.
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