El balneario real que salvará al mundo

AutorYaotzin Botello

Especial

HEILIGENDAMM, Alemania.- Mientras en Francia estaba hirviendo la revolución, en la costa del noreste de Alemania pasaba algo muy diferente: un médico prescribió al duque Friedrich Franz I bañarse en las aguas del Mar Báltico para mejorar su salud.

Ese fue justo el momento en que se descubrió el primer balneario de Europa. El duque, ya mejorado por las características minerales del agua, lo nombró Heiligendamm, el Malecón Sagrado.

A más de 200 años de distancia, el balneario continúa teniendo algo de sagrado y atrae, ya no a duques ni condes, pero sí a los grandes gobernantes de hoy.

Por ejemplo, este próximo 6 de junio estarán aquí los Jefes de Estado y de Gobierno de los ocho países más ricos del planeta, Alemania, Canadá, Estados Unidos, Francia, Japón, Italia, Reino Unido y Rusia, aunque no es seguro que los líderes de estos países usen el spa o se bañen en las aguas saludables del mar.

Heiligendamm se fue formando con la visita de grandes personalidades. Una reina quería imponer su estilo arquitectónico y un zar después le añadía algo más.

Duques y condes, poetas, escritores y músicos, todos dieron su pincelada para terminar dejando un conjunto de cinco edificios que parecen castillos, palacios y hasta un partenón.

Un detalle que llama la atención es que todas las fachadas son más blancas que la túnica de los santos, algo que le vale el mote de "La Costa Blanca".

Estos cinco edificios del balneario fueron operados por 150 años como un balneario. En tiempos de la República Democrática Alemana fueron usados como un sanatorio. No los cuidaron y empezaron a desmoronarse hasta que, ya después de la Reunificación alemana, el restaurador de castillos Horst von Bassewitz fue llamado a escena para levantar este patrimonio europeo.

Después de casi cinco años de reparaciones y de un acuerdo con la firma Kempinski como operador, este balneario fue reabierto en junio del 2003 como un hotel pero sin traicionar la arquitectura que los ricos y poderosos de entonces le dieron.

Y ahora que regresan los ricos y...

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