Aventuras al natural
| Autor | Dalila Carreño |
Saltos y sobresaltos, giros inesperados que te agarran desprevenido, descensos en picada por ríos donde la rapidez de reacción es fundamental a la hora de remar a contracorriente... el rafting se convierte en una de las opciones de recreación más divertida para zambullirse en la naturaleza.
"¡Es una gran aventura! Las risas están a más no poder. También tiene una parte de disciplina porque vas con un guía y hay mucho trabajo en equipo, en donde las emociones las compartes con tus compañeros de balsa", afirma Ena Mildred Buenfil Zamudio, secretaria general de la Asociación Mexicana de Turismo de Aventura y Ecoturismo (AMTAVE).
De acuerdo con la AMTAVE, los ríos más atractivos para el rafting son Tampaón, en San Luis Potosí; Copalita, en Oaxaca; y Pescados, Actopan y Filobobos, en Veracruz.
"Lo más impactante del Tampaón es el color turquesa del agua. No es un río de emociones exageradas, pero el paisaje te deja sin aliento. Es un cañón de roca caliza, completamente virgen y se pueden ver parvadas de guacamayas en la parte alta de la sierra", explica Buenfil Zamudio.
El Copalita es el río con más rápidos en México, unos 40. Está dividido en tres partes, y en algunas se pueden ver aves migratorias como la espátula rosada.
El Pescados es uno de los más famosos debido a que se ubica en Jalcomulco, Veracruz, donde se encuentran las empresas pioneras de esta actividad en México.
"Casi todo el año tiene rápidos. Hay uno llamado 'La Bruja Blanca' donde la corriente te lleva hacia una pared", indica Omar Vázquez, gerente general de la empresa de turismo de aventura RaftMéxico.
"Visualmente también es interesante porque se pueden ver garzas, águilas y un tipo de langostino de agua dulce llamado acamaya".
El río Actopan, también en Veracruz, cuenta con "El Descabezadero", formado por pequeñas cascadas de aguas transparentes donde se pueden observar tucanes, momotos y al pájaro bandera.
En el caso del Filobobos, de ese mismo Estado, inicia en la Cascada "El Encanto", a la que se llega luego de atravesar una pequeña grieta, y en donde habitan aves como jacanas y el martín pescador.
¡Hay para todos los gustos!
Los ríos en México se dividen en clases de la uno a la seis dependiendo de su grado de dificultad, y esta clasificación se basa en parámetros internacionales, apunta Buenfil Zamudio.
Omar Vázquez agrega que, con las debidas reglas de seguridad, es una actividad que prácticamente puede hacer cualquiera (a excepción de embarazadas, operados recientemente o personas con problemas de columna).
"Hay ríos con rutas de escape facilísimas en donde, a medio viaje, puedes salir sin problema", indica Vázquez.
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