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Arremete Francisco contra corruptos

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Vincent
AutorIrene Savio

Corresponsal

EL VATICANO.- En un discurso de denuncia contra la "mordida", el Papa Francisco afirmó ayer que las personas corruptas le hacen daño hasta a sus propios hijos.

"(Los hijos de los corruptos), quizás educados en colegios costosos, quizás criados en ambientes cultos, han recibido de su papá, como comida, porquería, porque su padre, al llevar pan sucio a la casa, ¡ha perdido la dignidad!", dijo el Papa.

"Esta pobre gente ha perdido la dignidad en la práctica de la "mordida" que solamente lleva con sí, no el dinero que ha ganado, sino la falta de dignidad", sentenció en la misa matutina pronunciada en el albergue de Santa Marta, en el Vaticano.

En esta línea, el Pontífice pidió rezar por los hijos de estos deshonestos, que son dañados por los actos de sus padres.

"Tal vez hoy nos haría bien rezar por los niños y jóvenes que reciben de sus padres un pan sucio. También estos tienen hambre, ¡tienen hambre de dignidad!", insistió el Pontífice.

Haciendo uso de esa astucia de índole práctica y propia de los jesuitas -orden religiosa a la que pertenece-, el Papa también dejó lugar para la esperanza y el optimismo para que incluso los pecadores cambien y dejen de ser corruptos y vuelvan al redil de la Iglesia.

"Recemos para que el Señor cambie los corazones de estos devotos del dios soborno.

"(Por que) se den cuenta de que la dignidad viene del trabajo digno, del trabajo honesto, del trabajo de todos los días, y no de estos caminos más fáciles que al final te quitan todo", expresó el Papa argentino.

No se trata de la primera vez que el Papa distingue al pecador, considerado como...

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