Arrecia pugna religiosa

AutorVerónica Jiménez

IXMIQUILPAN / Hidalgo

Al cumplirse el ultimátum para el desalojo de 36 familias evangélicas de San Nicolás ante el resurgimiento de la intolerancia religiosa, los protestantes exigieron el reforzamiento de la seguridad a los cuerpos policíacos ante el temor de lo que pueda surgir de un momento a otro la violencia.

Por lo pronto, hay confianza entre la minoría religiosa que las fiestas de los fieles difuntos detengan la amenaza que pesa sobre ellos.

En entrevista con REFORMA, el delegado de San Nicolás, Pedro Beltrán, advirtió que nadie sabrá en que momento procederán al destierro puesto que avisarles solo generará más escándalo.

"Nosotros estamos en lo dicho, pero no avisaremos cuando procederemos al desalojo puesto que si lo hacemos tanto la policía como los medios de comunicación armarán más escándalo y no queremos que nos pinten como los malos del cuento" afirmó.

Sostuvo que ya hay acercamiento con autoridades del gobierno del estado, y parece que con el cumplimiento de algunos acuerdos pactados desde agosto del 2001 que estaban detenidos, se destraba un poco este conflicto de intolerancia religiosa, sin embargo, son los "hermanos"...

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