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'Un argüende que no se tolera'

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Vincent

TLAQUEPAQUE.- Entre la angustia y el miedo viven los habitantes de la Colonia San Pedrito a causa del caos generado por vándalos y agentes de la Policía Municipal.

Un toque de queda se puede apreciar por las noches, pues los colonos se encierran para no ser víctimas de la delincuencia.

"Mucha mariguanada, mucho peligro.

Ya en la noche no puede uno salir", afirmó Genoveva Garza, quien vive en la zona desde hace más de 40 años.

Al ocultarse el sol, la oscuridad se adueña del lugar y es que el alumbrado público es deficiente.

"Si hay cuatro lámparas, dos prenden y dos no", mencionó una de las vecinas afectadas, quien prefirió mantener el anonimato argumentando seguridad.

Los corredores se vuelven un ring de boxeo, pues pandillas de la colonia se enfrentan sin consideración.

"En esta cuadra incluso los últimos pleitos que hubo, hubo heridos de bala", comentó otra habitante del lugar, también de manera anónima.

Es por eso que pegar pestaña se ha vuelto una tarea complicada.

"No dejan dormir, puro borrachito ahí y mariguanito ¡grite y grite!", advirtió Consuelo, otra de las agraviadas.

Y los encargados de mantener el orden y la tranquilidad sólo perjudican.

Según entrevistados, en el cruce de las calles Puerto Cacalilao y Cerro Azul una vivienda es habitada por agentes de la Policía Municipal.

"Hay personas que trabajan de policías y toman los fines de semana y tiran balazos y nomás vienen las patrullas y se toman una cerveza con ellos y se van, pero como son policías no les hacen nada", contó la primer entrevistada anónima.

Música a todo volumen es el aviso de que la fiesta ha comenzado...

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