ARGONÁUTICA / Universidad del Western

AutorJordi Soler

El Western, ese género cinematográfico que hasta hace muy poco se llamaba "películas de vaqueros", tiene un curioso arraigo en España, que en México no tiene, quizá porque aquí se trata de un género que ya fue explorado, hasta el hartazgo y con sus folclorismos, con charros en lugar de cowboys, en la época de oro de nuestro cine.

Mientras aquí se rodaban esas películas, en España, que entonces vivía bajo la dictadura franquista, tenían preferencia los westerns de John Ford, o de Sam Peckinpah o Sergio Leone, por ser historias políticamente inocuas, que eran invariablemente aprobadas por la censura de la época.

El efecto positivo, de aquella imposición tan negativa, es que en España hay una importante cultura del género.

La primera conversación que tuve, hace años, con Juan Marsé, ese narrador extraordinario que acaba de cumplir, hace unos días, ochenta años, fue sobre una película de vaqueros : The searchers (John Ford, 1956), que en España se llama Centauros del desierto y en Latinoamérica, por si lo de España fuera poco, Más corazón que odio. Es una película que Marsé ha visto muchas veces y que yo hasta entonces, confesé con mucha vergüenza, no había visto nunca. La profundidad del análisis que hizo, con un whisky en la mano y como que no quería la cosa, me envió directamente a comprar la película que es, en efecto y como usted ya ha de saber, magistral.

Luego, otra noche, mientras andábamos calle arriba, cada quién rumbo a su casa, me contó que veía los westerns (los ha visto absolutamente todos) con su nieto, que es más o menos contemporáneo de mis hijos.

Inspirado por el maestro propuse un programa de westerns a mis hijos, porque luego de analizar The...

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