Nombres, Nombres y ... Nombres/ El arancel del 17.5% al tomate, los riesgos implícitos y la falta de ayuda de Economía

AutorAlberto Aguilar

PARA NADIE ES un secreto la importancia que tiene el tomate en el contexto que vive el campo mexicano, plagado de dificultades. Cuando hablamos de ese producto vienen a la mente empresas bien organizadas y competitivas en los mercados. De hecho en la balanza comercial agropecuaria es el artículo más importante con unos 500 millones de dólares anuales.

Aunque unos 300 ó 400 productores serían los más representativos, su universo llegaría hasta unos dos mil en entidades como Sinaloa, Sonora, BC, BCS, Tamaulipas, SLP, Jalisco y Querétaro en donde generan más de 350 mil empleos. Además para estados como Guerrero y Chiapas representan un importante soporte al atraer miles de jornaleros que se ocupan hasta 8 y 9 meses del año.

El problema es que ahora los productores de jitomate se ven amenazados por la aplicación de un arancel antidumping del 17.5 por ciento advalorem que de hecho ya comenzó a correr. Se trata de una investigación que se retomó y que data de 1996 cuando EU comprobó que siete empresas mexicanas vendían por debajo de su costo. Cuatro en Sinaloa, dos de BC y una de Jalisco.

La denuncia fue detonada por una coalición de productores de Florida. Nuestros agricultores sin embargo lograron con el gobierno de ese país un acuerdo de suspensión por cinco años que expiró en octubre del 2001. Su compromiso era ordenar el mercado y comprometer a un 85 por ciento de los productores a no vender a precios de dumping.

Aunque eso se logró, con el tiempo se volvió a incumplir. Básicamente porque el otro 15 por ciento que quedó libre, junto con otros productores recompraban en el mercado interno y vendían afuera por debajo de un precio mínimo que se había establecido con EU, generándose una auténtica competencia desleal. Frente a la falta de solidaridad productores de Sinaloa, entre ellos la Asociación de Agricultores del Río Culiacán que encabeza Juan Habermann decidió en mayo por estrategia renunciar al acuerdo establecido en 1996 con el Departamento de Comercio.

La intención era volver a intentar estabilizar el mercado con la participación de otros productores como por ejemplo Angel Urrutia, Eduardo Martínez de Jalisco, Mario Steta de Querétaro, Renan Cruz de Sonora, Walter Latofski de Tamaulipas, Donaciano Hernández de SLP, Sergio Esquer de Sinaloa y Alberto Leree de BC vía la Comisión de Investigación y Desarrollo que lleva Mario H. Robles. Nuevamente el reto es comprometer a un 85 por ciento de los productores e ir por otro acuerdo antes de...

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