Entrevista /José Guadalupe Carrera / Apuestan a fortalecer mediación y arbitraje

AutorYáscara López

El éxito de los juicios orales descansará en una una reforma integral del sistema de justicia y en el fortalecimiento de esquemas alternos como la mediación, conciliación y arbitraje, asegura José Guadalupe Carrera Domínguez, Presidente del Tribunal Superior de Justicia del DF.

Los Centros de Justicia Alternativa son la apuesta para el siguiente año, señala el Magistrado, pues el objetivo es que el grueso de los asuntos lleguen a la mediación, conciliación y arbitraje, y sólo en algunos casos se aplique el derecho penal.

¿Qué falta para los juicios orales?

Todo. Bueno, lo más importante que es la voluntad. Y lo demás que se instrumente por los causes normales que serían una consulta a nivel del DF, para que la gente que tiene conocimiento pudiera opinar, y también la población.

Después, si hay voluntad por parte del Ejecutivo y Legislativo, pues que se instrumenten la medidas correspondientes atendiendo a nuestra legislación. No es simplemente la implementación y copiar un sistema diferente de otras latitudes, sino de implementarlo de acuerdo a nuestra cultura jurídica.

Lo importante sería que fuera en la materia penal, familiar y en las demás materias, en ese orden.

¿Qué infraestructura se necesita para aplicar los juicios orales?

Es una infraestructura totalmente diferente a la que se tiene. Si hablamos de la materia penal, para hablar de los juicios orales tenemos que pensar no sólo en el concepto de juicio oral como la posible solución en la justicia penal, es una falacia. ¡No! Éste es una parte de todo un procedimiento.

Es decir los juicios orales se dan ante el órgano jurisdicción, ante el juez, pero falta ministerio público, la policía y falta ejecución, es decir, es una etapa muy larga.

Entonces, tenemos que inscribirnos en un sistema que se llama acusatorio, y ese sistema requiere otros elementos fundamentales para llevar a los juicios orales. Por ejemplo, el equilibrio entre las instituciones del Ministerio Público y la defensoría de oficio, que es una institución que ya olvidaron; se requiere equilibrar estas dos instituciones para que haya como consecuencia mayor ponderación en cuanto a los valores.

Por ejemplo, los defensores de oficio en el Distrito Federal, en los juzgados de primera instancia, llevan un 60 ó 70 por ciento de los casos, entonces el que lleve un defensor de oficio 240 causas al año es una locura, es casi impedir el acceso a la justicia que es la obligación que impone el estado.

El otro aspecto es echar mano...

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