Tiempo de Negocios / Apuesta Gobierno a mercado interno con proyectos por dls. 3,500 millones y acciones en serie

AutorDarío Celis Estrada

La semana pasada el Presidente Vicente Fox anunció el llamado Programa para Impulsar el Desarrollo con Base en el Mercado Interno. Se trata de un conjunto de acciones para reactivar la economía y el empleo domésticos.

Uno de los puntos relevantes es la puesta en marcha, a partir de este mes de mayo, de varios proyectos de infraestructura que actuarán como detonadores de la actividad económica y reactivación de las empresas mexicanas.

El conjunto de megaproyectos implicarán inversiones de aproximadamente tres mil 500 millones de dólares. Algunos tendrán plazos de maduración de hasta cinco años e involucrarán diversos rubros.

Por ejemplo, ahí está encajada la hidroeléctrica El Cajón, la reconfiguración de la refinería Minatitlán, el Libramiento de Matehuala, seis plantas de generación de energía eléctrica y 47 plataformas marinas de Pemex.

Asimismo, unas 20 plantas tratadoras de agua, el hospital de altas especificacones Ojara en Mérida y la rehabilitación del recinto de la Biblioteca Vasconcelos, tendente a crear una red nacional de bibliotecas.

Los proyectos se complementan con políticas públicas, como simplificación para abrir nuevas empresas, facilitación para la operación de maquiladoras y trato arancelario benéfico a la industria de la confección y el vestido.

También se incluye la puesta en marcha de la primera etapa del proyecto eMéxico, a fin de empezar a conectar los principales municipios del País al internet para sentar las bases de una regionalización del desarrollo.

El programa también contempla la ampliación de los proveedores nacionales de Pemex, que dirige Raúl Muñoz Leos, y la CFE, que capitanea Alfredo Elías Ayub, para elevar el contenido nacional del 25 al 40 por ciento.

Tan sólo en la construcción de las subestaciones eléctricas se pretende empezar a exigir un grado de integración local del 35 por ciento, es decir: 10 puntos porcentuales más de lo que se solicitaba.

De igual forma el plan foxista plantea incrementar la reserva de las compras de Gobierno para compañías mexicanas, como medida inmediata para reactivar la situación financiera de la gran mayoría de ellas.

En ese mismo contexto, está la decisión del Gobierno federal de empezar a fragmentar en paquetes las subsecuentes grandes licitaciones para permitir que las empresas mexicanas compitan y ganen esos proyectos.

Todo lo anterior se va complementar con la nueva Ley de Adquisiciones, que si bien se quedó "atorada" en la Cámara de Senadores, se espera destrabarla a...

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