Mucho por aprender de Baja California Sur
| Autor | Adalberto Ríos |
Aun cuando las playas y otras maravillas naturales de Baja California Sur resultan una tentación para su sola contemplación y gozo, los sudcalifornianos han creado una serie de museos que vale la pena conocer para entender la dimensión de esa tierra en el pasado, el presente y el futuro de México.
El morenito en el arroz
El Museo Regional de Antropología e Historia de La Paz fue creado (según dice la cédula oficial que vende el INAH) "con la intención de difundir aspectos relevantes de la cultura y de la naturaleza de la península de Baja California". Si el guión museográfico de las salas se respetara, como lo marca el pequeño documento en cuestión, habría que felicitarlos dado que la historia de esta parte de la nación es poco conocida.
Sin embargo, las facetas de Baja California Sur han sido encajonadas de manera tal que no son lo esencial del museo. Las exposiciones temporales, venidas del centro, ocupan los lugares principales, dando la sensación de que éstas son más importantes que lo propio de la región, mensaje que me parece infortunado, especialmente para los niños sudcalifornianos.
Por desgracia, lo anterior no es privativo de La Paz, se da en distintas regiones de la República Mexicana. Nadie puede negar la importancia de una sección en cada museo dedicada al concepto de nación y áreas para exposiciones temporales, pero me parece que la nación debe presentarse justo como la suma de las aportaciones regionales.
Busqué a su director para expresar mi punto de vista, opinión no excepcional, pues el libro de comentarios contiene abundantes testimonios de personas decepcionadas por la marginación de lo regional... precisamente lo que uno busca en estos museos.
El director y sus trabajadores fueron amables y tolerantes y, por lo que vi, dispuestos a transmitir los valores y principios para los que existen estas instituciones. Además de sus intenciones, es claro que urge una práctica real del espíritu federalista.
Los jesuitas y sus misiones
Al detenerse en Loreto (350 km al norte de la Paz) llama la atención su antigua misión y su museo dedicado al fenómeno misional de Baja California.
En una antigua construcción del siglo 18 se han montado una serie de objetos e informaciones para apreciar en su justa medida el significado y la magnitud de la presencia jesuítica en esta parte del continente.
Entré al museo un domingo por la mañana y en el corredor encontré a un hombre que atendía a los niños y procuraba percatarse de que cada visitante...
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