Alista su Banco América del Sur

AutorAlejandro Pairone

Corresponsal

BUENOS AIRES.- Sudamérica intentará dar otro paso en su camino hacia la integración y la autonomía con la creación, en pocos meses, del Banco del Sur, una entidad multilateral para el fomento y desarrollo de proyectos de infraestructura y comercio.

Lanzada por Venezuela y asumida de inmediato como propia por la Argentina, la propuesta sumó rápidamente a los Gobiernos de Paraguay, Bolivia y Ecuador y Brasil.

Quienes manifestaron taxativamente que por el momento se mantenían al margen fueron las Administraciones de Chile, Colombia y Perú. Uruguay, aunque prometió su adhesión no ha firmado los acuerdos.

Autoridades de Argentina y Brasil que participaron en el diseño de la entidad dijeron a REFORMA que el proyecto integra un plan vasto que tiene como meta la desdolarización.

En los hechos la iniciativa se materializará en la creación de una moneda única sudamericana para el comercio intrarregional basado en las divisas nacionales, y que debe liberar las reservas internacionales para pagos extrarregionales.

"Todo proyecto de integración financiera deberá culminar con una moneda única", sentenció Roberto Feletti, vicepresidente del Banco de la Nación Argentina.

Para el Gobierno de Brasil, el Banco mismo es el primer paso hacia la interrelación financiera, que se producirá más temprano que tarde.

"El Banco es uno de los pasos necesarios para una integración mayor, y llegar a plasmar la unificación de las monedas", definió en un cercano colaborador del Ministro brasileño de Finanzas, Guido Mántega.

Por lo pronto, según coincidieron todas las fuentes consultadas, el esfuerzo está puesto en presentar los estatutos y conformación del Banco del Sur en un plazo inferior a los 120 días a partir del 3 de mayo.

Aunque casi todos los aspectos están por resolverse y sometidos a debate, las fuentes coincidieron en que hay gran cantidad de puntos sellados, referidos a la naturaleza misma de la entidad.

En el directorio del Banco del Sur sólo habrá delegados de Gobiernos sudamericanos, cada uno de los cuales tendrá el mismo derecho a voto independientemente del aporte financiero de su país.

La idea es que recién en una segunda etapa, y a mediano plazo, la integración pueda ampliarse a otros países pero sólo latinoamericanos.

Los primeros aportes rondarán una cifra aún por definir en torno de los 500 millones de...

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