Del ahorro a la monotonía

AutorKarina González

Si bien usar uniforme escolar no sólo es un ahorro en la economía familiar y evita a los pequeños tener que pensar qué ponerse para ir al colegio, a veces también puede resultar un poco monótono vestirse de la misma manera semana tras semana.

"En estos tiempos en los que las marcas han tomado tanta importancia, el uniforme es una buena opción para lograr un clima de igualdad entre los estudiantes y eliminar las diferencias sociales.

"Además, influye en la identidad escolar y el sentido de pertenencia, así como en la reducción de gasto monetario, pues la ropa no se maltrata tanto ni hay que comprarla tan seguido", explicó Alicia Caltum, asesora de imagen y directora del Instituto Imagen Integral.

En contraparte, portarlo rutinariamente puede tener algunas desventajas, añadió, pues los alumnos pierden individualidad, limitan su personalidad y les cuesta más trabajo sobresalir.

De acuerdo con Caltum, si los estudiantes no se sienten cómodos con el uniforme que utilizan, su energía y estado de ánimo pueden verse afectados, pues no están contentos con su físico.

Además, a veces puede ser cansado para los papás que sus hijos pierdan, rompan o manchen el pantalón, el suéter o la camisa, ya que es necesario volver a comprarlos.

En ese sentido, es importante bordarles el nombre del estudiante y lavarlos cuidadosamente para evitar maltratarlos.

"El diseño de los uniformes no está pensado para los diferentes tipos de cuerpo. Usar algo que no hace sentir bien a los menores afecta su estado de ánimo y por consecuencia su productividad", agregó.

Según Caltum, hoy en día el diseño de los uniformes debe considerar la comodidad y confeccionarse con cortes entallados que favorezcan el confort de los niños.

Asimismo, es importante tomar...

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