Y ahora, ¿quién podrá ayudarlos?
| Autor | Juan Manuel Figueroa |
Ni la paciencia ayuda al Atlas.
La suerte del técnico Rubén Omar Romano parece estar echada para dejar próximamente a los Zorros, pues ayer volvieron a mostrar carencias y falta de idea futbolística al caer 0-1 ante los Tigres.
Luego de que la directiva respaldara al argentino durante la semana ante los problemas de descenso en los que se encuentran los Rojinegros, se esperaba una cara distinta, sin embargo, de nuevo mostraron que no tienen equipo para buscar cosas grandes, ante unos felinos que a medio gas dieron cuenta de los locales.
Ni siquiera la derrota de Estudiantes Tecos en Cancún le sirvió a los Zorros para tratar de despertar en el torneo en el que suman 4 puntos, de 21 posibles, y finalizaron con la cabeza abajo y con su técnico en la cuerda floja, pues la decisión por parte de la directiva no tardará más de tres juegos.
Desde los primeros minutos, los dirigidos por Ricardo Ferretti mostraron la solidez que los ha caracterizado a lo largo del torneo y les bastó menos de 25 minutos para irse al frente en el marcador.
El argentino Damián Álvarez recibió al 21' una pelota filtrada de parte de Danilo Verón y sólo le bastó controlar, ingresar sin marca al área atlista y batir a Miguel Pinto para echarle a Romano un palazo más de tierra.
Aún con el gol en contra, los Zorros trataron de salirse del letargo en el que se encontraban y buscaron la portería felina, siendo lo más peligroso un disparo de Georgie Welcome al 27', que coqueteó con el travesaño de la portería de Enrique Palos.
Para la segunda mitad, el Atlas, por más que buscó, no pudo generar peligro real en la portería de Palos, hasta que llegó un penalti a favor de los locales al 71', provocado por Mauricio Romero y cometido por Israel Jiménez, que Jonathan Lacerda falló un minuto más tarde.
La falla se convirtió en la tumba para el uruguayo, pues la afición no le perdonó la mala ejecución y a partir de ahí lo envolvieron en abucheos cada que el balón pasaba por sus pies.
Con la pena máxima fallada y la presión de tener al técnico pendiendo de un hilo, la desconcentración se comió a los Zorros al quedarse con 9 hombres, por las expulsiones de Néstor Vidrio al 86' y de Efrén Mendoza al 92'
Sin embargo, la presión no sólo estuvo dentro de la cancha, pues también La Fiel mostró su preocupación por el paso del equipo y por momentos pidió la salida de Romano.
Ahora los Rojinegros tendrán una semana para pensar y tratar de revivir en el Apertura 2011, pues la tabla de cocientes se...
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