Ahogado de la risa

Dicen que como México no hay dos, pero y qué sucede cuando contamos algo de los mexicanos.

- ¿Por qué los mexicanos no van a los Juegos Olímpicos?

- Porque los que saben nadar y los que corren bien ya cruzaron a los Estados Unidos.

¿Por qué a Fox le decían El Redentor?

- Porque tuvo a cuatro millones de arrepentidos.

Resulta que un mexicano, un argentino, una rubia espectacular (como esas que siempre me ruegan) y una gorda (como las que a ustedes les tocan), viajan en un vagón de tren.

Después de unos minutos de viaje, el tren pasa por un túnel, y se oye un gran beso seguido de una sonora cachetada.

Al salir del túnel, el argentino tenía un cachete color rojo pitaya.

La rubia espectacular pensó: "...este argentino hijo de su madre me quería dar un beso pero se equivocó y se lo dio a la gorda y ella le dio una cachetada".

La gorda espantosa pensó: "...seguramente ese argentino malparido le dio un beso a la rubia y ella se enojó y le dio una bofetada".

El argentino pensó: "...mexicano maldito... le dio un beso a la rubia y la rubia se equivocó y me dio a mí la cachetada".

Y el mexicano pensó: "...ojalá que venga otro túnel para darme otro beso en la mano y pegarle otro guamazo a este argentino hijo su madre..."

Dos charros en la cantina y uno le reclama al otro:

- ¡Oiga compadre! ¿Usted anda diciendo que yo tengo hemorroides?

- No, yo...

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