Ahogado de la risa

AutorPez Globo

Todo era risas hasta que nos dimos cuenta que el tartamudo quería jamón.

Un tartamudo pide en un puesto de la calle:

- M-m-me da u-u-un elote.

- Como no, joven, ¿con chile?

- Si-si-si-sin chile, por favor.

- ¡Ay, no mames! ¡Ya le puse... y del que pica!

Una tartamuda le pregunta a un carpintero:

- ¿En cu-cu-cuánto sa-sa-sale una ca-ca-cama?

- En tres mil pesos -responde el carpintero.

- ¿Y po-po-poniendo yo la ma-ma-madera?

- ¡Así le sale gratis, mi reina!

En el banco, el cajero le dice a un cliente:

- ¿Cuál es su nombre?

- Pe-Pe-Pedro Pé-Pé-Pérez.

- Perdón por la pregunta, ¿es usted tartamudo?

- ¡No! Pero mi padre sí lo era y el del Registro Civil ¡un hijo de puta!

Había un capitán tartamudo a cargo de una misión importante en América que le ordenó a su tripulación:

- Cu-cu-cuando yo di-di-diga tierra to-to-todos al agua y a na-na-nadar hasta la costa.

Al cabo de un rato, el capitán grita:

- Ti-ti-ti...

Y todas las personas a bordo del barco ya se habían tirado al agua cuando escuchan:

¡Ti-ti-tiburones!

Iban tres amigos tartamudos en una moto a gran velocidad. De repente, el de en medio comienza a decir:

- Ja-ja-ja...

Y el que manejaba la moto le pregunta:

- ¿Po-po-por qué te ríes?

- ¡No! ¡Ja-Ja-Jaime se cayó!

Un tartamudo va a una tienda de animales y le dice al vendedor:

- Se-se-señor, ¿cu-cu-cuánto cuestan los...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR