Ahogado de la risa

AutorPez Globo

Dicen que en la cama y en la cárcel se conoce a los amigos, por ello aquí les dejamos unos chistes de hospital:

Está el doctor en su consultorio cuando de repente entra la asistente y muy preocupada le dice:

-Doctor, doctor, el paciente que usted acaba de dar de alta cayó muerto frente a la clínica.

El doctor, muy pensativo, le pregunta:

-¿Y cayó de frente a la calle?

-Sí.

-Pues vaya y dele vuelta... para que crean que iba entrando.

El teléfono suena en el consultorio y uno de los pacientes le pregunta al doctor:

-¿No es muy pesado, eso de que lo llamen en momentos inesperados?

-Los médicos estamos acostumbrados a que nos llamen por teléfono a cualquier hora -contesta fanfarroneando el galeno-. Una noche me despertó un hombre a cuya esposa ya había atendido antes. Me dijo: "siento molestarlo tan tarde, pero creo que mi mujer tiene apendicitis". Aún medio dormido, le recordé que yo le había quitado el apéndice a su esposa dos años atrás y que nadie tiene un segundo apéndice, pero irónicamente el tipo me respondió: "doctor, quizá usted no haya oído hablar de un segundo apéndice, pero sí es posible tener una segunda esposa, ¡qué no!'"

Un hombre muy adinerado llega a una clínica privada y le dice al médico con cara de que no lo calienta... ¡ni un table en Las Vegas!

-Doctor, según mis estudios tengo un caso agudo de herpes, gonorrea, peste bubónica, sífilis y sida.

-No se preocupe -contesta...

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