Ahogado de la risa

AutorPez Globo

Este chiste se lo dedicamos a todos los padres que tienen un pequeño engendro que los hace quedar mal.

El hijo de un joven matrimonio se había convertido en un problema: siempre que hablaba decía groserías al por mayor (nada tiene que ver con nuestros chistes, pues el morro ni leer sabía).

Total, como se acercaba la Navidad, los papás acuerdan que, si a la hora de hacer su pedido a Santa Clos el pequeño decía una sola grosería, sólo le darían excremento de perro.

- A ver hijito -dice el papá- vamos a hacerle tu carta a Santa, ¿qué le quieres pedir?

- Bueno papá -dice el chavito- quiero unos pinches patines y una puta bicicleta.

Llega la mañana de Navidad y el chavito baja ilusionado a la sala, pero, apenas entrando, pisa el excremento, da otros dos pasos y vuelve a pisar más excremento, da tres pasos más y vuelve a pisar otro mojón.

- ¿Qué pasó? -le pregunta el papá muy divertido-, ¿qué te trajo Santa?

- Creo que un pinche perro... ¡pero no encuentro al hijo de la fregada!

····

Una mujer acude a consulta con su ginecólogo y le expresa su preocupación: su marido estaba desarrollando una afición por el sexo anal y ella no estaba convencida de que fuera una buena idea.

-No se apure -le dice el médico- veamos, ¿usted lo disfruta?

-Sí, doctor.

-¿Y le duele?

- No, doctor.

- Bueno -dice el médico-, entonces no veo por qué no puedan practicar el sexo anal si eso es lo que quieren, siempre y cuando tome las precauciones debidas para no quedar embarazada.

- Ah, caray, doctor, ¿una puede quedar embarazada por tener sexo anal?

- Claro -dice el médico- ¿poTMs de dónde que cree vienen los políticos?

····

Una chica se sube a un vagón del Metro.

- Oiga, señor -dice la dama-...

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