Ahogado de la Risa

Un vaquero, vestido con camisa vaquera, sombrero vaquero, pantalones de mezclilla, botas y espuelas entra a una cantina y pide un trago.

Una dama se sienta a su lado, ordena su bebida y comienza a hacerle plática...

- ¿Eres un vaquero de verdad?- pregunta la mujer.

- Bueno- responde el tipo- he pasado toda mi vida en el rancho criando ganado, domando caballos, reparando cercas... creo que sí lo soy. ¿Y tú..?

- Yo nunca he estado en un rancho así es que no soy una vaquera- dice ella- pero soy lesbiana. Paso todo el día pensando en mujeres. Mientras como, me baño, veo televisión siempre estoy pensando en mujeres.

La dama se va y el vaquero pide otro trago.

Al poco rato otra mujer llega a sentarse a su lado.

- ¿Eres un vaquero de verdad?- le pregunta al tipo.

- Bueno- responde él- toda mi vida pensé que sí... pero me acabo de enterar que soy una lesbiana...

Ahí tienen que un sacerdote estaba atendiendo el confesionario cuando, de pronto le dan unas ganas incontrolables de ir al baño así es que sale volado y agarra a un seminarista que por ahí pasaba y le pide que lo supla.

- Pero Padre, todavía no me ordeno sacerdote, no puedo atender la Confesión... no sabría qué hacer.

- No te preocupes- le dice el sacerdote- tengo todos los pecados en una lista pegada al confesionario, no hay forma de que te equivoques...

El seminarista...

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