Agrandan aprendizaje

AutorSilvia Garduño

Desde la primaria hasta la universidad, Edna Contreras, de 22 años y quien sufre de debilidad visual, fue considerada ciega por sus maestros, quienes jamás se percataron de sus posibilidades de aprendizaje.

Edna se acostumbró a que otras personas le leyeran textos y a imaginarse las operaciones matemáticas que venían en los libros o que los profesores escribían en el pizarrón.

Hace tres años comenzó a usar el "magnificador", un aparato que agranda los textos a un tamaño que los débiles visuales pueden leer bien y que permite al usuario modificar el brillo, el color y la luz de la manera que mejor le convenga.

El Centro de Atención Tecnológica para Personas con Discapacidad cuenta con esa tecnología, que cuesta cerca de 8 mil pesos y que Edna aprovecha cuanto puede para leer los libros que le dejan en la universidad, donde estudia para maestra de personas con discapacidad.

"En la escuela me dejan leer muchos textos, muchos libros y pues ya no tengo la necesidad de que alguien me lo esté leyendo, sino que yo lo puedo ir leyendo al ritmo que yo quiera", comenta.

"Para resolver libros de matemáticas me es muy funcional, porque es muy diferente que te vayan describiendo, por ejemplo, el orden de una ecuación, a que tú lo veas, y es más fácil que tú lo puedas resolver".

Con su mano derecha, Edna utiliza una especie de mouse de computadora y lo coloca sobre un texto.

El mouse tiene una cámara que proyecta el texto en una pantalla, y que Edna ajusta a un tamaño de 7 centímetros, utiliza un...

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