Un adelantado del periodismo
Autor | Carlos Monsiváis |
Granados es una novedad en el medio: un periodista que entrega a diario un dossier, un expediente o una noticia estudiada e incorporada a una explicación general.
La formación inicial
Miguel Ángel Granados Chapa nace en Pachuca, Hidalgo en 1941, estudia Leyes y periodismo en la UNAM, desde la adolescencia se interesa en el periodismo, interviene en un proyecto fallido (la formación de un partido socialcristiano), y colabora y codirige en diversas publicaciones y estaciones de radio (fue director de Radio Educación, por ejemplo). En 1965 entra a Excélsior, en donde es secretario de redacción, articulista, secretario de la redacción y subdirector editorial, entre otras tareas. Casi desde el principio Granados se incorpora al grupo alrededor de Julio Scherer García, impulsor de las transformaciones graduales y/o radicales en el periódico.
El Oficio
¿Qué es en la década de 1960 El Oficio (periodístico)? El término, hoy fuera de circulación, designa a una versión, la más rigurosa, de la tradición de las redacciones, centrada en la visión lo más unitaria que se puede de la realidad del país y (en algo) del mundo. Los del Oficio marcan la jerarquización de las noticias con intuición y con sujeción inevitable a las reglas de juego y conocen a fondo el meollo de lo que no se publica (crímenes son del tiempo que es censura). Granados se hace amigo de los consagrados del Oficio: Julio Scherer, Francisco Martínez de la Vega, José Alvarado, Manuel Buendía. Renato Leduc, Elena Poniatowska y de buen número de los que, sin tanto renombre, son "la Universidad" a la disposición.
Un dato básico de los practicantes del Oficio: el respeto al lector, al que los "maquinazos" agreden, y al que no se le debe engañar con escamoteos ideológicos y digresiones de principio a fin. Granados aprende bien las leyes del Oficio y está muy al tanto, y divertidamente, de los que "desconocen el Oficio". Lo singular de Granados es su resistencia al lirismo (una especialidad de José Alvarado y, a veces, de Martínez de la Vega), al pintoresquismo y a la intervención desmesurada del Yo. Granados es muy escueto, asume un tema, lo sitúa en su contexto jurídico, político o económico, ofrece sintéticamente la trayectoria de la persona o la institución abordadas, o los motivos de un fenómeno, y da sus conclusiones, críticas y a veces muy ásperas, pero nunca ad hominem, jamás insultantes (ésta también es una regla del Oficio: el insulto favorece al insultado porque exhibe la debilidad de...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba