Actor del pueblo

AutorAbril Valadez

Cuando Vicente Fernández se desempeñó como actor, de 1971 a 1991, la Época de Oro del cine mexicano llevaba años desaparecida, sin embargo, el cantante ocupó un espacio de ese vacío que dejaron ídolos de ese periodo.

Aunque la industria del cine era otra y se estaba transformando con una nueva generación de cineastas, técnicos y actores surgidos de escuelas que apostaban por un cine más realista, social e incluso intelectual, según considera el investigador de cine y crítico de Grupo REFORMA, Rafael Aviña, aún había lugar para que las estrellas pudieran destacar en la gran pantalla.

"Las diferencias sociales en nuestro País y la ausencia de las tecnologías esclavizantes de ahora (celulares, cine digital, plataformas stream) conseguía que una buena parte de la población de México, sobre todo capitalina, consumiera productos protagonizados por ídolos populares fuertes o efímeros como Cornelio Reyna, Juan Gabriel, Santo, Blue Demon, Tinieblas, Capulina, José José, Lyn May, Alfonzo Zayas y muchos más, entre ellos, por supuesto Vicente Fernández que tuvo enorme impacto en taquilla y discográficamente", comenta Aviña.

El potencial de Don Chente para conquistar la taquilla lo pronosticó el productor Gregorio Walerstein -quien era uno de los principales impulsores de la industria fílmica de América Latina y creador de estrellas y éxitos de la Época de Oro-, cuando el cantante lanzó su primer disco La Voz que Usted Esperaba (1967).

Al menos una decena de filmes del oriundo de Huentitlán El Alto fueron producidas por Walerstein, quien también impulsó las carreras de María Félix, Pedro Infante y Pedro Armendáriz. Volver, Volver (1973), El Hijo del Pueblo (1974), Jalisco Nunca Pierde (1974), El Albañil (1975) o La Ley del Monte (1976), fueron unos títulos hechos con el charro.

"Varias de las películas de Vicente Fernández dirigidas por Rafael Villaseñor Kuri, realizador a su servicio y lucimiento como lo era Miguel M. Delgado con Mario Moreno Cantinflas, eran nuevas versiones o variantes de otras tantas historias de Infante, Aguilar e incluso de Jorge Negrete como La Ley del Monte, que reciclaba la clásica Historia de un Gran Amor (1942). A ello habrá que sumar que fueron producidas por Gregorio Walerstein que decidió reciclar con Chente varios de sus éxitos añejos", dice el investigador.

Fernández protagonizó 31 de 33 cintas en las que participó, y en la mayoría de estas, que también produjo, tuvo libertad para decidir sobre sus personajes, desde...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR