Acarician las puertas

PIEDRAS NEGRAS.- Luego de recorrer unos tres mil kilómetros, muchas veces a pie y en condiciones precarias, más de mil 700 migrantes centroamericanos llegaron anoche a las ciudades de Piedras Negras y Acuña, fronterizas con Texas.

La caravana, que partió de Honduras y cruzó por El Salvador, Guatemala y el país a lo largo de enero, arribó en camiones de personal prestados por empresas de La Laguna y vigilados por policías después de haber pasado el domingo en Saltillo.

Sin embargo, pese al largo camino y con el territorio estadounidense a la vista, el verdadero reto inicia ahora para migrantes: conseguir que Estados Unidos les dé asilo político tras sufrir en sus países pobreza y violencia.

Las autoridades migratorias estadounidenses en Eagle Pass, Texas, colindante con Piedras Negras, tramitan como máximo 15 casos de peticiones al día.

Esto también representará un desafío sin precedentes para Piedras Negras y Acuña, que jamás habían recibido un contingente de migrantes tan grande y, además, deberán albergarlo por semanas o hasta meses.

El fin de semana, los centroamericanos viajaron de San...

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