Abel Hibert / México en las Olimpiadas
| Autor | Abel Hibert |
Cada cuatro años se repite la misma historia: comienzan los juegos olímpicos en algún lugar del planeta. Los medios de comunicación y las autoridades deportivas mexicanas empiezan a crear elevadas expectativas acerca del desempeño de nuestros deportistas. Al paso de los días vienen las desilusiones, decepciones y fracasos y nos damos cuenta que, salvo honrosas excepciones, nuestros deportistas no son competitivos a nivel internacional. Desgraciadamente, nuestra falta de competitividad no se limita al ámbito deportivo, sino que trasciende en otros campos de la vida nacional.
¿Cuál es la razón de tan bajo desempeño de nuestros deportistas en el campo deportivo internacional? En teoría, tenemos la materia prima necesaria para la práctica de los deportes que es la juventud. A junio del 2004, se estima de acuerdo a datos del INEGI, el 18.8 por ciento de la población de nuestro país son jóvenes entre 15 y 25 años. Estamos hablando de un universo de 19.7 millones que pudieran ser deportistas de excelencia.
La edad mediana en nuestro país es de 23.3 años. Todavía somos un país dominado por la juventud. Estas cifras se comparan favorablemente con el porcentaje de jóvenes y la edad mediana que tienen otros países que regularmente tienen un mejor desempeño deportivo que nosotros. Por ejemplo, en Argentina el porcentaje de jóvenes es de 18 por ciento y la edad mediana es de 27.8 años; en China, el 15.6 por ciento del total y 30 años; en Cuba, el 13.4 por ciento y 32.9 años; en Alemania, el 11.1 por ciento y 39.4 años; en Rusia, el 15.6 por ciento y 36.9 años; en España y EU, el 14.6 y 13.8 por ciento y la edad mediana es de 37.6 y 35.8 años respectivamente.
El problema no es la falta de jóvenes. El problema está relacionado con fallas desde la educación primaria, en donde no existen adecuados programas de educación física y éstos se limitan a sacarlos al patio unos minutos a que respiren algo de smog. Por supuesto, que no existe un programa para la detección de talentos desde estas edades que es cuando comienzan las potencias deportivas a trabajar con los futuros deportistas.
Obviamente que el asunto de la educación física no es una prioridad para las autoridades educativas: únicamente el 6 por ciento de las 664 escuelas normales a nivel licenciatura tiene la especialidad de educación física, y el 5.5 por ciento de los alumnos en este nivel está estudiando esta especialidad. Y en muchas ocasiones, los profesores de educación física son improvisados y...
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