Los 60 / Un crimen aristocrático

AutorGuadalupe Loaeza

Hace mucho que no me acordaba de Sofía Bassi. Si mi amigo Pável Granados no me hubiera contado esa historia que le fascina, y sobre la cual está investigando, lo más seguro es que sólo la recordaría como una de las pintoras más excéntricas y menos conocidas de México.

¿Quién se acuerda de ella ahora?, ¿en qué museos estarán sus pinturas? Me temo que en ninguno. También me temo que ya pocas personas recuerdan que protagonizó una de las historias más morbosas y divertidas de finales de los 60.

En ese entonces, no había sitio en México donde no se comentara el crimen ocurrido en la Quinta Babaji, la mansión de la familia Bassi en Acapulco, el 3 de enero de 1968, cuando se supone que la familia se encontraba tomando el sol frente a la alberca.

Los Bassi eran conocidos por su dinero, por la fama de Sofía y, sobre todo, por la belleza de la hija, Claire. La joven era tan hermosa que, para casarla, decidieron darla a conocer entre la nobleza europea. En 1960, Claire se casó con un conde italiano, Cesare D'Acquarone, a quien conoció en una fiesta en Mónaco. Por el cronista de Excélsior, sabemos que en su boda Claire lució un traje inspirado en las Cruzadas, creación de Armando Valdés Peza. En la revista Social de abril de ese año, podemos ver a la novia, bellísima, con unos ojos enormes y una sonrisa encantadora.

Claire era lo más parecido a una estrella de cine; aparecía en las revistas de sociales, las cuales estaban felices de publicar las imágenes de Claire y Cesare, de luna de miel por África, en donde cazaron un elefante. Lo que no se imaginaba el novio era que ella no brillaba precisamente por su inteligencia, por lo que el matrimonio fue tormentoso. Seguramente, él era celosísimo, aunque se decía que también era un poco infiel.

Me puedo figurar el rostro de la ambiciosa suegra cuando se enteró de que la belleza de su hija había enamorado a uno de los hombres más distinguidos de Italia, dueño de una compañía aérea. No, esta pintora originaria de Córdoba, Veracruz, no se imaginaba que terminaría por emparentar con una familia como ésta.

Acababa de llegar el año nuevo y México estaba casi listo para recibir a los atletas y a los turistas para la Olimpiada. El primer día del año, la actriz Merle Oberon y su esposo, Bruno Pagliai, dieron una cena a la que asistieron, entre otros, los Bassi. Apenas dos días más tarde, el conde D'Acquarone era asesinado frente a la alberca de la casa familiar. Unas horas después, Sofía Bassi se presentó en la...

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