Recibe Dilma país partido

AutorAlberto Armendáriz

CORRESPONSAL

RÍO DE JANEIRO.- La Presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, fue reelegida ayer para un segundo mandato de cuatro años, pero el gigante sudamericano está partido en dos.

En las elecciones más dramáticas y reñidas desde el regreso de la democracia en Brasil, Rousseff obtuvo un ajustado triunfo con el 51.64 por ciento de los votos frente al 48.36 por ciento del senador socialdemócrata Aécio Neves.

La victoria de Rousseff garantiza que el oficialista Partido de los Trabajadores (PT) se quede 16 años en el poder.

Pero se prevé que la Presidenta enfrente desafíos en su nuevo mandato para revertir la situación económica, colaborar con una Oposición fortalecida y convencer a casi la mitad de la población que no votó por ella.

"La Presidenta volverá a asumir en una posición muy debilitada, sin el liderazgo renovado que le hubiera otorgado un contundente triunfo.

"La mitad del país no está de acuerdo con el rumbo del Gobierno, principalmente por la falta de crecimiento económico, el aumento de la inflación, y los constantes casos de corrupción que salen a la luz", apuntó a Grupo REFORMA Alexandre Gouveia, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Brasilia.

Tras conocer su victoria, la Presidenta exhortó de inmediato a la unión de Brasil.

"Mis primeras palabras son un llamado a la paz y a la unión. En las democracias, unión no significa necesariamente unidad de ideas. Presupone, en primer lugar, apertura y disposición para el diálogo. Esta Presidenta está dispuesta al diálogo y ése es mi primer compromiso para el segundo mandato: diálogo", señaló Rousseff al celebrar su victoria en Brasilia, en un búnker con militantes petistas.

La Mandataria, que en ningún momento mencionó a su adversario del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), anunció que realizará una reforma política para promover los cambios que el país necesita para seguir avanzando.

También indicó que tomará medidas urgentes para recuperar el crecimiento económico, hoy virtualmente estancado, y emprenderá mejoras en la legislación para combatir con mayor rigor la corrupción, uno de los temas que monopolizó la campaña electoral, sobre todo por el escándalo de cobro de sobornos en la estatal...

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