Crea tu iglú
| Autor | Dolores González |
La llegada de las altas temperaturas no implica que sea necesario encender el aire acondicionado durante todo el día.
Si quieres que el interior de tu vivienda se sienta tan fresco como un iglú, el primer paso es construirla con materiales que dejen afuera al calor.
Recurrir a aislantes térmicos en muros ayudará a que tu hogar les ponga un alto a sensaciones térmicas que provoquen mal humor y sudor.
Pero eso sí, el dinero que planees destinar y determinar qué tanto frescor buscas llevan mano.
"Depende mucho del presupuesto que se tenga, hay que hacer una evaluación de cuánto me va a costar el material y cuántos grados hacia el interior se va a beneficiar el edificio", comenta Eduardo Ortiz.
El arquitecto de Arqbios agrega que ya existen blocks de construcción que, además de térmicos, son sustentables.
Por ejemplo, los ecoblocs de cemento son más ligeros, menos calientes y se consiguen por alrededor de 8 pesos la pieza de 20 centímetros de espesor, cuando un block de más de 15 centímetros curado al vapor vale poco menos de 6 pesos.
También existen los blocks de ladrillo que tienen una mayor capacidad de aislamiento térmico.
Según información de Ladrillera Santa Clara, un bioblock de ladrillo de 15 centímetros de espesor tiene una resistencia térmica (Factor R) de 0.6462, mientras que el de un block tradicional es de apenas 0.1268.
Otro método a la hora de construir es el empleado por el despacho RDLP Arquitectos.
"En todo el perímetro de nuestras casas ponemos doble muro de block de cemento.
"El truco está en que hacemos un 'sándwich', que en el centro le ponemos el material aislante, que viene siendo el styrofoam", explica Víctor Montalvo, gerente de proyectos de la firma.
De esta manera, el calor que pega en el exterior es absorbido por el aislante y no se transmite al interior.
Sin embargo, para que este método sea efectivo es necesario que la cimentación sea preparada para soportar el peso duplicado.
Por otro lado, los blocks de concreto celular ligero llevan el aislante integrado.
La clave de este material está en su masa térmica que consiste en miles de esferas de aire que no están comunicadas entre sí.
Si bien esto aumenta el costo, con un precio de alrededor de 50 pesos por pieza, la inversión tiene sus ventajas: su efecto aislante alcanza los 12 grados de diferencia entre el interior y el exterior.
Un método alternativo es el utilizado en NG Arquitectos dirigido por Carlos Núñez, quien trajo a México la técnica islandesa.
"La lana...
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