Rebanadas / Toques marinos e italianos

AutorCony Delantal

WHISKY TRAS WHISKY

Hará cosa de año y medio, en Coyoacán, me topé que con un restaurante italiano que se llama Séptimo, en Venustiano Carranza, esquina con Carrillo Puerto. Recuerdo bien que el logo era un 7°.

Aquella vez comí ahí y tengo presente que era un lugar de comida italiana sencilla (pizzas, pastas, carpaccios) y que en todo caso destacaba por una decoración modernona que hacía su buen esfuerzo por diferenciarse y ganarse un lugarcito en la variopinta oferta gastronómica de Coyoacán.

Por qué nunca les hablé aquí de ese lugar permanece siendo un misterio, pero por algo son las cosas. Hoy se los platico porque deambulando por Altavista reconocí ese mismo logo en un nuevo restaurante que se llama Séptimo Osteria, imposible de no ver porque su fachada es bastante atractiva; junto al Decräb.

Veníamos mi marido y yo en el coche cuando vi el lugar y le sugerí que nos quedáramos a cenar a ver qué tal. El muy ingrato no quería que porque andaba cansado. ¡Ahhh! Y cómo no si la noche anterior se había ido de farra al dichoso "jueves del amigo".

Así que bastó un simple gesto de mi parte, y un movimiento inquieto y constante de mi pierna para que intuyera mi explosión de furia ante la situación.

Finalmente entendió el mensaje y se detuvo en el lugar. Por suerte tenían mesa en su agradable terraza. Un espacio lindo con una barra vistosa y un horno para pizzas que añade encanto.

Ya más animado, o mejor dicho, más resignado, mi marido pidió un whisky en las rocas y yo una copita de vino. Mi única angustia era que el vivales, ya con bebida en mano, fuera a seguir con su parranda del día anterior. Nomás eso me faltaba.

Por supuesto que en cuanto se nos acercó el mesero le saqué todita la información del restaurante. Resulta que sí es de los mismos dueños de aquel modesto lugar de Coyoacán, aunque se nota a leguas que le dieron una buena refinada a su concepto con tal de estar a la altura de las expectativas de San Ángel.

Por lo visto ha funcionado. El restaurante estaba prácticamente lleno de gente de muy buen ver que al igual que nosotros disfrutaba del maravilloso encanto de los viernes en este rincón italiano.

Ya ambientados se nos antojó el carciofo Séptimo ($155), alcachofa gratinada con queso acompañada con dip de morrón y jitomate deshidratado. Un poco durita la alcachofa, pero bien de sabor, sin llegar a ser la mejor que he comido en mi vida.

Mi marido pasó de largo el primer tiempo, pero eso sí ya iba en el segundo whisky. Yo no perdoné la...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR