40 años dedicados a la salud mental
| Autor | Antonio Bertrán |
FOTOS: ÉDGAR MEDEL
La doctora María Elena Medina-Mora duda de que se pueda alcanzar un mundo utópico sin drogas, pero sí cree en la regulación y en la necesidad de blindar a la población joven contra el consumo de sustancias adictivas a temprana edad.
En la adolescencia, la doctora María Elena Medina-Mora no pudo evitar estar "horneada". Corría la década contracultural de 1960 y todos sus amigos fumaban mariguana, así que en las reuniones que eran en lugares cerrados alguna vez estuvo bajo los efectos de la hierba.
Una semana después de celebrar, el tres de octubre, su cumpleaños 68, la prestigiada académica recordaba aquella época riendo: "Yo estaba muy chica y era bastante fresa, pero todos los hombres la usaron (la mariguana), y si estábamos en un lugar cerrado todos estábamos horneados, pero no sabíamos".
A esa joven adicta a los libros, y a sus amigas, lo que "realmente" les preocupaba era que al salir de aquellas fiestas les "apestaba la ropa y el cabello".
Otra vez riendo, Medina-Mora aclara: "No nos preocupaba que usaran mariguana nuestros amigos; claro que en ese contexto uno sí está muy expuesto y no había esa conciencia de riesgo, y claro que sí estuve bajo los efectos de la mariguana".
¿Y le gustaron?
Pues, sí (risas). Pero no me gustaba como el efecto después.
Ninguna droga le despierta "simpatía" a la académica recientemente reconocida por su casa, la UNAM, con un doctorado honoris causa por 40 años de labor académica e investigación enfocada en los aspectos metodológicos, psicosociales y epidemiológicos relacionados con las adicciones y la salud mental.
En su oficina acristalada del Centro de Investigación en Salud Global, que coordina dentro del Instituto Nacional de Psiquiatría, la tarde de la entrevista reconocía un "conflicto de interés" al hablar de las substancias prohibidas, dados los efectos que causan y que le ha tocado atestiguar y tratar. Aunque considera que "se ha satanizado mucho" a drogas como la mariguana (la de mayor consumo entre jóvenes de 12 a 17 años, según la Encuesta Nacional de Drogas, Alcohol y Tabaco 2016-2017).
"Yo trabajo en un lugar de concentración de las psicosis tóxicas en los chicos, que de repente tienen síntomas de esquizofrenia; unos se quedan con ella y otros la superan, pero yo sí veo esos daños porque (aquí) se concentran".
Sin dudarlo, la doctora en Psicología Social por la Universidad Nacional responde que el "verdadero" opio de los pueblos es "la violencia, la inequidad, la pobreza", por lo que "el tema no debe de ser en contra de las drogas, sino cómo lograr mejores comunidades, más calidad de vida".
También de inmediato, la académica responde que la peor de las drogas está legalizada: el alcohol.
"El alcohol está asociado con 200 enfermedades, es el que más se consume, es el que más mata y también tiene un potencial de daño a otros muy grande", advierte.
La coautora de Problemas por el consumo del alcohol y drogas en centros de trabajo. Cómo prevenirlos (Pax, 2009), se refiere a los problemas que la bebida genera: violencia intrafamiliar, accidentes automovilísticos y baja productividad laboral, además de un problema cognitivo durante la intoxicación, y después un daño.
"Al cerebro le da igual si (la droga) es legal o ilegal", aclara. "La heroína es una droga complicada porque genera una dependencia fuerte pero hay substancias de sustitución que funcionan bien, y digamos que el problema con las metanfetaminas es que no tenemos todavía medicamentos, y como se combinan con muchos tóxicos, hacen un daño muy grave; creo que esa también es una droga muy mala".
Hace dos décadas, Medina-Mora sorprendió a una audiencia convocada por México Unido contra la Delincuencia, al responder que la mariguana "sí, definitivamente hacía menos daño", aunque "el problema más grande es que no sabemos qué hace".
Por ejemplo, hay una controversia sobre si es riesgoso manejar bajo los efectos de esta hierba. Estudios de laboratorio han comprobado que sí se pierde la capacidad de percepción del tiempo y la distancia, por lo que hay riesgo...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba