3, 2, 1: ¡Feliz Año Nuevo!
| Autor | Teresa Rodríguez |
Enviada
PARÍS.- No le temas a los clichés y planea celebrar un fin de año en alguna de las típicas opciones que ofrece París a los turistas. Vale la pena tomar las siguientes alternativas una vez en la vida.
Todos a la calle
Una de las prácticas más frecuentes que realizan los turistas durante los festejos de Año Nuevo es acudir a las plazas principales de los destinos que visitan. Y en ellas, entre amigos y un montón de desconocidos, esperan el tañido de las primeras campanadas para descorchar una botella de champaña, comerse las 12 uvas y darse el tradicional abrazo. ¿Acaso puede haber algo más chic que hacerlo en Campos Elíseos, rodeado de boutiques de gran lujo?
Desde esta avenida, si el clima lo permite, se obtiene una buena vista del destello de luces que comienza a medianoche en la Torre Eiffel y que continúa en la rueda de la fortuna que, cada año, adorna la Plaza de la Concordia. Tras la sinfonía de luces, la avenida ofrece múltiples opciones para cenar, beber y bailar.
Si lo que quieres es festejar en la calle, pero asegurando una vista panorámica de la ciudad, entonces debes dirigirte hacia la Plaza del Sagrado Corazón, en Montmartre, y posteriormente continuar la fiesta en los bares y clubes que se encuentran en el Barrio de Pigalle.
Es prudente hacer un par de preparativos para esta noche: compra las botellas de champaña con antelación; si lo dejas para el último minuto, pagarás una fortuna por ellas.
Para tomar en cuenta: En París, la gente acostumbra salir a la calle con pequeñas flautas de plástico y con caramelos y chocolates de broma, de esos que explotan al quitar las envolturas. Conviene señalar que el comercio de fuegos artificiales y petardos es legal en Francia.
Navega por el Sena
Esta es, quizá, una de las alternativas más socorridas, por lo que es necesario reservar con suficiente antelación. Hay posibilidades para todos los bolsillos, pero las más populares son las que ofrece Bateaux Parisiens, pues sus tarifas van de los 320 a los 490 euros, según la mesa y el servicio elegido; hay "étoile", "select" y "premier".
Los cruceros salen de la Torre Eiffel en punto de las 20:30 horas, pero la fiesta dura hasta el amanecer. Mientras el barco surca tranquilamente por las aguas del Sena, se disfruta -de preferencia en pareja- de la vista nocturna que ofrecen los monumentos y construcciones más emblemáticos de París: el Museo de Louvre, el d'Orsay, la Catedral de Notre Dame y la Biblioteca Nacional. Además, se sirve una...
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