De Vuelta al Ruedo / Miguel Bosé, de los más deseados
| Autor | Martha Figueroa |
Desde que me acuerdo, todas mis amigas mueren por Miguel Bosé. Ya saben, las mujeres amamos los imposibles. En cambio a él se le nota que no daría la vida por ninguna.
Por eso me impactó su nuevo disco, donde con voz desgarradora repite frases tan fuertes como: "olvidarme tú, que yo no puedo, no voy a entender el amor sin ti...".
¿Se imaginan a uno de los hombres más deseados del mundo arrastrándose?
Yo no, pero me gustó. Realmente sorprende escuchar a Bosé cantar cosas menos complicadas. Un Bosé más normalito que anda en buena temporada: simpático, guapo, tolerante, relajado.
Pero por favor no se equivoquen. Me gusta Miguel Bosé, pero también hay que decir que tiene la cualidad de ser, cuando quiere, o divino o el más pesado. Eso sí, inteligente siempre.
Volviendo a las nuevas canciones, qué bonito es lo simple, ¿no?, porque estar descifrando letras es agotador y aburrido. El disco anterior era bueno, modernismo y me encantaba "Morena Mía", pero cada vez que oía "Sereno", por ejemplo ("ánima y miseria, abiertamente salvaje, inmune más o menos a por qué salvar de un naufragio antiguo...") no podía evitar quedarme con la sensación de ¡ah caray! ¿qué nos habrá querido decir?".
En "Por vos Muero", Bosé presenta canciones que son como mini películas de tres minutos. Es decir, cuenta historias, pero con bandas sonoras impresionantes. Mi favorita es muy triste, se llama "Amiga, Gracias por Venir" y trata de una mujer que está en la cárcel y recibe la visita de una amiga que se hace cargo de criar a su hija.
Como verán, el tema no es nada ligero, pero Miguel la interpreta tan bien y los arreglos son tan buenos que termina por ser una canción maravillosa. Hay una trompeta con sordina que te provoca llanto al minuto. Te transporta a esas películas italianas sufridoras donde casi siempre los muertos son niños hermosos.
¿Saben cuáles? La típica cinta en la que el hijo único va feliz en bicicleta y de pronto pasa un camión y lo aplasta. O hay otras donde un niño moribundo pide como última voluntad que lo lleven a la feria y se muere en plena rueda de la fortuna. Bueno, pues ahí es donde entraban esas canciones tan tristes.
Ahora que lo pienso, no entiendo por qué veía de niña esos dramones. La cuestión importante es que el álbum del español provoca nostalgia y también algunas desilusiones. Como el dueto con Alejandro Fernández.
A lo mejor es la combinación de voces o que aquí la potencia de "El Potrillo" no viene al caso, pero no me latió.
Mejor les...
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