Tendencias para la transformación de la función legal en la era después del coronavirus
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Tendencias para la transformación de la
función legal en la era después del
coronavirus.
Industria Legal
Estamos casi en la mitad del 2021; un año y
unos pocos meses después desde que la
OMS declaró el estado de pandemia por
culpa del COVID-19. Aunque las previsiones
de la mayoría de los países estimaban que
con los programas de vacunación ya
deberíamos haber alcanzado la inmunidad
de rebaño para estas alturas del año, lo
cierto es que estamos lejos de esos alegres
números y no en pocas jurisdicciones
hemos visto como se incrementan los casos
de contagio y fallecimientos diarios. Si a
esto le sumamos la agitada situación social,
política y económica que experimentamos
en la región, estamos al frente de uno de los
más difíciles escenarios a la hora de
administrar nuestros negocios: La
incertidumbre de no saber, ni siquiera
estimar, qué va a pasar en el corto, mediano
y mucho menos en el largo plazo.
Aunque es difícil fijar un camino de acción
claro para impulsar la innovación de los
equipos legales en estas situaciones de
incertidumbre, sí es podemos considerar
algunas ideas y prácticas que están
tomando algunos líderes de departamentos
jurídicos para impulsar sus iniciativas de
mejora, aún en estos tiempos difíciles. A
continuación, una exploración rápida a estas
tendencias que fueron identificadas en un
estudio realizado recientemente por EY Law
en conjunto con el Centro para la Profesión
Legal de la Escuela de Derecho de la
Universidad de Harvard:
1. Los equipos jurídicos deben mejorar
en su gestión de riesgos, brindando
asesoría legal basada en métricas y
datos: Y esta tendencia no se refiere a que
los equipos legales deban contar con
sofisticados modelos de analítica predictiva.
DANIEL S. ACEVEDO
Se trata de ser capaces de responder a
preguntas tan simples cómo ¿Cuántos
contratos hemos negociado en el último
mes? ¿Por cuánto valor? ¿Cuántas
consultas y de qué tipo hemos respondido en
los últimos 15 días? Necesitamos construir
indicadores sobre nuestra operación del día
a día de tal forma que estemos en capacidad
de identificar patrones de comportamiento de
riesgos y así empezar a hacer una mejor
gestión del riesgo.
2. Ampliar la oferta de soluciones legales
al negocio, manteniendo la misma
estructura de costos: Considerando que
muchas empresas están tomando una
actitud conservadora frente al gasto, no es
sorpresa que los equipos legales no estén
viendo aumentos en los presupuestos
asignados a sus áreas, pero sí están
experimentando un aumento importante en
la carga de trabajo. ¿Cómo ofrecer mayor
valor al negocio si no tengo posibilidad de
contratar más recursos? La respuesta está
en contar con procesos ágiles, que permitan
la utilización más eficiente posible del tiempo
de los abogados.
3. Los equipos jurídicos deben contar con
modelos de servicio ágiles: Necesitamos
“sacar el derecho del departamento jurídico”.
Con esto me refiero a la capacidad de contar
con modelos de servicio que le permitan al
cliente interno obtener respuestas a sus
consultas legales sin necesidad de recurrir al
equipo jurídico en cada oportunidad. Algunas
ideas para lograr esto pasan por diseñar una
pequeña página web en la intranet
corporativa para respuestas a preguntas
frecuentes; diseñar un modelo de
estratificación de consultas para que
dependiendo del nivel de complejidad se
asignen diferentes perfiles de abogados; y
llegando hasta la construcción de chatbots
que permitan respuestas automatizadas.
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