Sufren acoso laboral

AutorAna Belén Negrete

El 30 por ciento de los jóvenes mexicanos entre 18 y 30 años es víctima de mobbing, una cifra superior a la media en la población en general que varía entre el 15 y el 20 por ciento, revelan datos de la Facultad de Psicología de la UNAM difundidos por Jesús Felipe Uribe.

Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el mobbing es un tipo de violencia dirigida a un empleado o grupo de trabajadores que implica acciones permanentes de acoso.

Entre las formas que reviste el "mobbing" o hostigamiento, de acuerdo a esta organización de carácter internacional, figuran, por ejemplo: la repetición de comentarios negativos sobre una persona o las críticas incesantes en su contra; desalentar todo contacto social con un trabajador o la propagación de chismes en el espacio de trabajo y fuera.

Para Uribe, los jóvenes universitarios son vulnerables debido a la gran demanda laboral y la escasez de puestos de trabajo.

"Están conscientes de que haber llegado a un puesto implica ya un gran beneficio, entonces, se someten muchas veces a este tipo de abusos, y abusos que son como reproductivos, es decir, porque es gente que fue violentada, y cuando llegan a puestos jerárquicos reproducen esa violencia en los jóvenes que vienen".

Por otra parte, Humberto Patiño, director de Asesoría Internacional en Competitividad Organizacional S.C., asegura que los jóvenes no tienen experiencia en el manejo de este tipo de conflictos. Aconseja que, si se consideran víctimas, deben reflexionar sobre qué causó el conflicto.

En ocasiones, el problema se debe a las características del agresor, pero también puede que el joven sea la causa del problema, cuando tiene manifestaciones de rechazo a la autoridad desde el seno familiar y lo traslada a lo docente y, luego, al trabajo.

"Estamos partiendo de que es un nicho de juventud, entonces no se tienen que saber todos los protocolos de interacción social en un trabajo".

RESPUESTA ANTE EL PROBLEMA

Patiño asegura que si un joven es acosado, es importante que hable con el jefe inmediato o al área de recursos humanos.

"Pensando positivamente, el jefe puede tener experiencia acumulada, conoce la cultura del escenario de trabajo, y recursos humanos tiene un acopio de informaciones que pueden ser similares o caso único".

La manera de tratarlo con el jefe inmediato, explica, debe constar de una narración objetiva, en la que se pida su punto de vista.

En cuanto a la forma de enfrentarse con el agresor, Patiño recomienda pedirle respeto...

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