Nombres, Nombres y... Nombres / SHCP por empujar ya reforma a pensiones del ISSSTE y sería base para un sistema nacional

AutorAlberto Aguilar

TRAS MESES de trabajo con legisladores para encontrar un esquema capaz de salvar el problema de pensiones que enfrenta el País, la SHCP de Francisco Gil Díaz buscaría enviar al Congreso en este periodo, la iniciativa concerniente al ISSSTE y que implicará que de golpe se pueda resolver la situación de 2.5 millones de burócratas, amén de sembrar la semilla para establecer un nuevo Sistema Nacional de Seguridad Social.

El viernes con lo sucedido en Ciudad Juárez, en donde un grupo de manifestantes incluso hasta agredió el convoy presidencial, quedó en evidencia que lograr esta otra reforma no va a ser sencillo, dados los intereses de por medio.

Las pensiones representan el principal problema de finanzas públicas a la fecha. Tan sólo este año, el déficit por este concepto en el ISSSTE, significará 25 mil millones de pesos, igual a todo el déficit gubernamental. Además la velocidad del crecimiento de ese faltante es para alarmar, puesto que para el final del sexenio andará en cerca de 40 mil millones de pesos ya ajustados, para el 2012 en 72 mil millones y en 134 mil millones de pesos para el 2020.

Si a lo anterior se suma el IPAB, Pidiregas y las dificultades que hay a su vez en los sistemas de pensiones de Pemex, CFE, banca de desarrollo, universidades y el RJP del IMSS se llega a un cifra del 116 por ciento del PIB. Lo anterior evidencia que el País está virtualmente en quiebra por ese concepto.

Posponer la solución lo único que hará es acrecentar un problema laboral del pasado que ya nos alcanzó por más de una causa. Una de ellas, un sistema de reparto que ya no se ajusta con la realidad demográfica porque la esperanza de vida se ha acrecentado y la edad de jubilación se redujo.

En otras palabras, mientras hubo suficientes hijos para sostener la pensión de los padres, no hubo problema. En el pasado 20 trabajadores mantenían a un pensionado, hoy esta relación es de sólo 5 y en el 2050 llegará a 2.

Se puede aducir también que el Gobierno fue pésimo administrador y que el dinero para las pensiones se destinó a otros fines, incluida la corrupción. Lo anterior es correcto, pero incluso con un manejo inmaculado la circunstancia no habría variado, ya que se calcula que el 85 por ciento del actual déficit se debe a la transformación demográfica, 10 por ciento a la desviación de fondos hacia infraestructura médica y sólo el resto a excesos.

Y resulta lógico porque en 1975 la esperanza de vida era de 64 años contra 75 de ahora. Además la edad...

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