Prólogo a la Segunda Edición

AutorVerónica Román Quiroz
Páginas15-18

DERECHO PENAL DEL ENEMIGO

PRÓLOGO A LA SEGUNDA EDICIÓN

¿Alguna vez han soñado con encontrar a alguien integralmente sabio, astuto, hábil qué de puntual respuesta a sus inquietudes, a sus más complejas formas. Hallar a alguien que les haga confiar sin mas, que les brinde cobijo seguro y razonado, ese que les hable de las fuerzas vitales, naturales y divinas con absoluto respeto; el que les aporte una explicación lógica, o una experiencia humana que les haga sentir identidad con su patria, con su carrera, con su vida, con su familia? iYo sil Y cuando conocí a Lalo supe que mi búsqueda interna relajada podía ser, que mi saciedad externa podría atardecer con cada convincente vibratura por el emitida.

Por eso afirmo qué descubrir a Eduardo Martínez Bastida va más allá de leerlo, de escucharlo, requieren de sentirlo; en cada frase, en cada risa, en cada paso y faceta. Su nobleza, su picardía y autenticidad no extrañan, sino envician a seguirle, a exigirle más.

Solo los amigos -le dije- se miran en el interior, conocen rincones apenas imaginados por los otros, esos que se señalan con ligereza en juicios calificativos de algo que en espejismos creyeron conocer. Por eso aprecio que Eduardo me permita exponerles unas líneas, libres, si, de esas que les cuentan su yo, el humano entusiasta, el que se sobrepone a cualquier energía negativa con lo mejor que puede sacar alguien de fe inquebrantable como él. Correr un maratón, servirse de la pluma o de los medios electrónicos y comunicar al que le lee sus puntos de atención, o consternación, son un par de ejemplos. Sus mensajes claros, motivadores son dignos de su marcha cotidiana. Resulta una delicia académica oírle en replicas durante los exámenes de grado en el posgrado de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México donde por largas horas los sustentantes con ojos desorbitados, timbres nerviosos empiezan a efectuar un primer acercamiento con el Profesor que les vio crecer en aulas, que vieron caminar por un pasillo, ese ser que vive de la leyenda, o que por primera vez les deja asomarse, en un poco, a sus acuciosos planteamientos y complejo vocabulario. Ese que le caracteriza como el abogado formado en rigor científico, empero de temperamento y espíritu cálido, noble que permite abrevar de sus experiencias que comparte.

¿Sera un litigante temido? No lo creo. Es el que respeto infunde, porque relaciona doctrina, filosofía, arte heurístico, con su practica ya calada, de presencia que impone y...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR