Respiran puro humo

tlaquepaque.- "Cuando no es el humo, es el polvo", dice Araceli Garibay mientras sostiene a un niño en brazos, bajo un cielo gris en los límites de las colonias La Huizachera y La Ladrillera.

En los últimos días, la estación de Las Pintas del Sistema de Monitoreo Atmosférico ha registrado la contaminación por encima de los 150 puntos, lo que equivale a contingencia atmosférica.

En un mapa, la Semadet muestra con un gran punto rojo la zona más contaminada de la Metrópoli; debajo de él están estas dos colonias de Tlaquepaque.

Donde se unen ambas colonias no hay pavimento ni empedrado, y a menudo ni camino trazado, apenas terracería por donde se mueven pesados camiones cargados con ladrillos recién horneados.

El olor del humo es penetrante -incluso con poco índice de Imecas, como ayer, con un promedio de 50-, pica la nariz y ojos y provoca, tras unos minutos...

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