Pumas y América se respetan demasiado y empatan sin goles

CIUDAD DE MÉXICO, enero 22 (EL UNIVERSAL).- De Pumas y América se esperaba una memorable batalla. Clásico de matar o morir, de un orgullo airoso y otro humillado, pero no: el auriazul y el azulcrema, a pesar de la calentura por una polémica arbitral, pactaron tregua sin goles.

El cuadro felino de David Patiño era favorito. Así lo dejó ver el Olímpico Universitario que respondió pletórico; incluso con sobrecupo en la planta baja del Pebetero, donde los pasillos fueron un trabuco y un latente peligro en caso de emergencia.

Reinó el morbo y la alta expectativa por ver a las figuras en su primera prueba de fuego del año. Por la localía, Nicolás Castillo que por primera vez se fue en blanco frente al "odiado", a quienes ya enfrentó dos veces y les había marcado en ambas ocasiones.

Este domingo no fue la tarde del "Killer" Castillo, quien fue peligroso hasta el segundo tiempo, cuando hizo un esfuerzo sobrenatural para rescatar un centro de Jesús Gallardo, a los 61 minutos, y que por poco terminaba en gol. Cinco minutos más tarde Nico ilusionó al estrellar el balón en el travesaño de Agustín Marchesín.

Las Águilas volaron sin ser letales. Los constantes gritos de Miguel Herrera desde la zona técnica trataron de moldear la visita que tuvo en Cecilio Domínguez su mejor destello frente a la cabaña de Alfredo Saldívar; al atacante paraguayo se le daba ser héroe frente a los...

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