Pulso Económico/ Reunión nacional de estadística

AutorJonathan Heath

La compilación sistemática de estadísticas en nuestro país empieza formalmente con la creación de la Dirección General de Estadísticas (DGE) hace 120 años. Las estadísticas económicas tienen muchos propósitos y usuarios; son la base para cualquier investigación seria, el pilar de la planeación gubernamental, el hilo conductor de la política económica y el reflejo de nuestra historia. Todos ganamos con estadísticas confiables y completas. Por lo mismo, la Sexta Reunión Nacional de Estadística fue necesaria y acertada.

No obstante, llama la atención la irregularidad de estas reuniones. Las primeras dos se llevaron a cabo en 1927 y en 1930, más de 45 años después de haberse creado la DGE. Entre la segunda y la tercera (1941) pasaron 11 años. La cuarta fue en 1958, 17 años después. De ahí transcurrieron 24 años antes de celebrar la quinta en 1982. Finalmente, 20 años después se celebró apenas la sexta reunión, lo que significa un promedio de 18 años entre cada una a partir de 1930, o bien, 20 años desde que se creó la DGE. Si estas reuniones son tan importantes, ¿por qué son tan escasas?

Parte de la respuesta viene en quienes han sido los participantes. A las primeras dos reuniones únicamente asistieron los Gobiernos de los estados y el Departamento de Estadística Nacional. En la tercera se incluyó a varias Secretarías de Estado y en la cuarta a los Gobiernos municipales. Finalmente, en la quinta reunión los participantes fueron los principales funcionarios de los Gobiernos federal, estatal y municipal. Dado que únicamente asistían funcionarios públicos y las decisiones estaban limitadas al Estado, no era necesario tener congresos nacionales frecuentes para pedir opiniones sobre su organización, metodología o cobertura.

Posiblemente una de las características más significativas de la Sexta Reunión es la apertura hacia el resto de la sociedad. En esta ocasión no solamente acudieron representantes de los tres niveles de Gobierno y de los poderes de la Unión, sino además los sectores privado, social y académico, agrupaciones empresariales y profesionales, así como organismos internacionales. El mensaje fue contundente: la elaboración de estadísticas deja de ser una decisión reservada al Estado. En congruencia con los tiempos y con la nueva Ley de Transparencia y Acceso a la Información, se empiezan a tomar en cuenta a los usuarios no gubernamentales.

Además de algunas conferencias magistrales sobre los sistemas de información estadística y los...

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